Cisma en el vestuario: ¡Piqué se desmarca de Messi y acepta la rebaja salarial!

Cisma en el vestuario: ¡Piqué se desmarca de Messi y acepta la rebaja salarial!

| 2020-10-19

| Pedro Riaño

Piqué se saldo del bando de Messi, Busquets y Jordi Alba y se alinea con Ter Stegen, Lenglet y De Jong.

Los jugadores del FC Barcelona, liderados por Leo Messi, se han cerrado en banda ante la petición del club de revisar sus contratos buscando un aplazamiento en el pago de un porcentaje del 30% a la espera de tiempos mejores. Ni siquiera quieren dialogar. Se han negado a asistir a una reunión con el presidente programada para esta tarde. Gerard Piqué se ha cambiado de bando y ha aceptado que le toquen el sueldo.

Gerard Piqué se ha unido a Ter Stegen, De Jong y Lenglet, los tres jugadores que hasta ahora se habían desvinculado de la decisión de la plantilla de negarse a aceptar una rebaja salarial generada por el recorte en los ingresos del club como consecuencia de la pandemia del coronavirus. La noticia, avanzada por el diario As, pone de manifiesto el cisma que en este momento se vive en el vestuario del FC Barcelona.



El clima de tensión entre los jugadores obtiene un reflejo natural sobre el rendimiento del equipo en el terreno de juego. El Getafe se echó en falta un plus de intensidad en algunos jugadores y todo indica que el tema económico está haciendo mella en futbolistas que ya son millonarios.

Messi, Busquets y Jordi Alba se niegan a los recortes de sus contratos

Piqué, que, como empresario que es, entiende las dificultades que sufre el club para hacer frente a sus pagos, ha optado por dejar plantado al bando de los "rebeldes" y se ha alineado a favor del club, entendiendo que, a pesar de los pesares, ni a él ni a los suyos les va a faltar para comer a pesar de la rebaja salarial, como les sucede a millones de familias en España y en todo el mundo.



La postura de Piqué adquiere relevancia al tratarse de uno de los capitanes de la plantilla. Los otros tres, Messi, Busquets y Jordi Alba, se mantienen firmes en su postura de negarse a que sus salarios sean recortados, una medida que el club ha querido poner en marcha para salvar a buena parte de su nómina de empleados en su mayoría mileuristas.

El club esperaba encontrar solidaridad entre sus jugadores, pero sólo ha recibido desprecio y una actitud lamentable sobre el terreno de juego que se ha traducido en dos resultados negativos desde que el conflicto está abierto.