Cristiano Ronaldo jugará esta noche ante el Manchester City poniendo en serio riesgo su integridad física según los médicos del Real Madrid, que se lavan las manos en el tema y no le han dado el alta médica. El jugador portugués vive en un permanente conflicto interno con el cuerpo médico del club. No se fía de sus diagnósticos y prefiere recurrir a otras opiniones cuando sufre una lesión. Es el caso que nos ocupa, con su microrrotura fibrilar de 1,5 centímetros. Cristiano Ronaldo acudió a dos médicos ajenos al club para conocer su diagnóstico, incluso se hizo unas pruebas "clandestinas" en un centro hospitalario del que tuvo que salir en el maletero para no ser visto. Luego se ha puesto en manos de su recuperador particular, Joaquín Juan, el mismo que cuida de la salud de Pau Gasol y en un tiempo récord se ha puesto en condiciones para volver a jugar. Cristiano Ronaldo sabe de la importancia del partido de esta noche y no se lo perdería por nada del mundo. No se lo va a perder, como el de la ida, porque hoy sí tiene buenas sensaciones. Y para él sus sensaciones son lo primero, por encima de la opinión de los médicos. Aún así, el cuerpo médico madridista le ha advertido de los riesgos que corre y se lava las manos al no proporcionarle el alta médica.