El joven centrocampista azulgrana acabó expulsado en su debut con el Barça Atlètic de Márquez
Sin lugar a dudas, Fermín López fue una de las revelaciones de la pretemporada del Barcelona. El joven centrocampista completó una gran gira por Estados Unidos con el equipo de Xavi Hernández y se convirtió en una de las grandes sensaciones del conjunto azulgrana.
De esta manera, el futbolista andaluz convenció a Xavi y se quedó en el primer equipo en este inicio de campaña. De hecho, incluso llegó a debutar hace un par de semanas en Villarreal y firmó un nuevo contrato con el Barça hasta el 2028.
No obstante, aprovechando el parón por selecciones, Fermín pidió jugar con el filial de Rafa Márquez para no perder continuidad ni ritmo y seguir sumando minutos con el Barcelona.
Tras esta petición, Xavi aceptó y el futbolista de 20 años ya pudo debutar con el filial azulgrana ante el Nàstic en Tarragona. Sin embargo, su debut no pudo ir peor, ya que acabó expulsado en el inicio de la segunda mitad por una doble tarjeta amarilla.
El centrocampista fue expulsado por Ortega Herrera de forma muy rigurosa. Había visto una amarilla por una falta en la primera parte y el colegiado le mostró la segunda en el 47' por una falta reiterada sobre un jugador del Nàstic cerca del área. De hecho, esta última tarjeta fue muy protestada, pero el árbitro no dudó en sacarla.
De esta manera, el debut de Fermín López con el filial fue doblemente amargo, ya que, además de la expulsión, el Barça Atlètic acabó perdiendo (1-0) con un gol 'in-extremis' de Ander Gorostidi.
Al mismo tiempo, varios compañeros suyos reconocieron que Fermín acabó desolado y llorando en el vesturario. "Fermín estaba llorando después del partido, se sentía muy mal porque quería ayudar al equipo", explicó Marc Casadó tras ese aparatoso debut del andaluz.