Luis Enrique ha convocado a 10 jugadores que fueron expulsados del Real Madrid
Le llaman antimadridista, pero a Luis Enrique sí le gustan los jugadores surgidos de la cantera del Real Madrid. No es culpa suya que los hayan echado a todos del Bernabéu para que jueguen los extranjeros.
Luis Enrique ha convocado a Álvaro Morata, Brahim Días, Rodrigo, Raúl de Tomás y Pablo Sarabia para que defiendan los intereses de la selección española ante Grecia y Suecia en la fase de clasificación para el Mundial de Qatar.
En la convocatoria ha aparecido un madridista, Dani Carvajal, después de 235 días sin presencia de jugadores blancos en la selección de España. Y a Luis Enrique le han tildado de antimadridista por no convocar a ningún jugador español del Real Madrid sin tener en cuenta que los futbolistas españoles estan de adorno en el equipo blanco y no juegan habitualmente porque hay que dejar paso a fichajes millonarios alemanes, croatas, belgas, brasileños, franceses o austríacos, que tienen que justificarl el precio que costaron.
Un madridista y cuatro exmadridistas en la actual selección
Y probablemente por eso, para darle una lección a Florentino Pérez, Luis Enrique prefiere llamar a ex madridistas del pasado que a madridistas del presente. En la actual convocatoria hay cinco futbolistas formados en la cantera del Real Madrid, que no servían para el primer equipo blanco y que fueron despedidos para que triunfaran fuera del Bernabéu. Se trata de Álvaro Morata, Brahim Díaz, Rodrigo y Pablo Sarabia y Raúl de Tomás.
Cinco canteranos del Real Madrid expulsados del club de sus amores contra un madridista en activo (Carvajal). Pero la afrenta y humillación de Luis Enrique a Florentino Pérez va más lejos, porque en anteriores convocatorias ha citado a otros exmadridistas como Marcos Alonso, Llorente, Reguilón, Mario Hermoso o Parejo.
En el pasado reciente fueron Javi García, Callejón o Borja Valero con Lopetegui; Álvaro Negredo, con Del Bosque; Luis García, Juan Mata y Roberto Soldado con Luis Aragonés. Y anteriormente Diego López.
Se trata de una lección de coherencia que Florentino Pérez no parece dispuesto a estudiar. Lo suyo es gastarse el dinero formando futbolista para presumir de La Fábrica, lugar en donde se fabrican jugadores internacionales destinados a triunfar en otros equipos.
Y mientras tanto, viva Bale, viva Hazard y viva Jovic... por poner tres ejemplos.
