Leo Messi marcó dos goles en el Celtic Park y decidió la victoria del FC Barcelona en Glasgow después de haber fulminado al Celtic en el encuentro del Camp Nou con tres de los siete goles que anotó el Barça. Messi se va de todos los demás en la clasificación de goleadores de la Champions League. Pero su actuación en Glasgow no puede limitarse a sus goles, porque Messi hizo mucho más que dos goles. Al margen de echarse al equipo a la espalda y ejercer de capitán poniendo orden en el juego, tuvo detalles de genio del fútbol, con obras de arte que no están al alcance de nadie más, ni siquiera de los que van anotando hat tracks con un rechace, un penalti y un empujoncito al balón. Messi mostró al mundo este detalle de maestro, un tipo de detalle que no está al alcance de Cristiano Ronaldo porque para llevarlo a la práctica es necesario poseer una calidad técnica que él no tiene. Brown fue a por el balón y al ver que no llegaba intentó llevarse por delante a Messi, pero éste supo burlar al contrario con un regate sutil que le dejó quebrado en el suelo y, además, voló lo suficiente para que su pierna en alto no pudiera detenerle. Un detalle de genio. Un detalle del mejor futbolista de todos los tiempos. El mundo entero lo vio. Y Cristiano Ronaldo lo sabe.
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