Si semanas atrás comentábamos la eliminación del FC Barcelona de la Copa de la Reina por alineación indebida de una de sus jugadores, una repetición del Caso Cheryshev, ahora el caos administrativo se produce en el Real Madrid, donde parece que no se enteran de lo que sucede a su alrededor.
Ha sido con motivo de la Euroliga de baloncesto. En la primera vuelta de la liga regular el Barça venció en el clásico ante los blancos por dos puntos (75-73) y la pasada semana, en el partido de la segunda vuelta, el Real Madrid venció por 91-86 después de la prórroga, a la que se llegó con empate a 73.
La Euroliga está muy apretada, dos victorias separan al primero del séptimo y todos luchan por entrar entre los ocho primeros para disputar las eliminatorias decisivas, aunque siempre mejor entre los cuatro primeros para disfrutar del factor cancha a favor.
Ante tanta igualdad los basket average particulares entre los equipos son importantísimos, porque tal y como va la competición se prevén muchos empates. Y ahí entra el Real Madrid y su organización, que pensó que después de perder por dos puntos en Barcelona y ganar por 5 puntos en Madrid, el equipo blanco tenía el basket average favorable con el Barça.
“Es una victoria que sabe bien. Estos partidos son así, emocionales, de energía más que de acierto y jugar bien. No deja de ser una victoria más en la liga regular, pero hemos superado el ‘basket-average’ y eso también es importante”, dijo el entrenador Chus Mateo al término del Real Madrid-Barcelona.
Error. Al entrenador del Real Madrid, a pesar de superar la sección los 40 millones de presupuesto, nadie le dijo que estaba equivocado, que el resultado que cuenta es el del final del partido y no el de la prórroga. Por tanto es el Barça el que tiene el average favorable con el Madrid porque ganó de dos puntos en el Palau y empató en Madrid.
Esa es la norma, que en los despachos del Real Madrid desconocen, a partir de un comportaniento antideportivo en un partido de Euroliga que en 2015 jugaron el Maccabi y el Darussafaka turco. El partido iba igualado y el Maccabi necesitaba una diferencia de 11 puntos, de manera que sus jugadores trataron de adecuar su juego al resultado para forzar la prórroga y así, con cinco minutos más de margen, tratar de conseguir la diferencia que precisaban. Pero el Darussafaka respondió. Con los tiros libres logró un 66-65 y luego sus jugadores no se movieron en defensa para evitar más tiros libres, dejando el camino libre a sus rivales para evitar un empate que forzara la prórroga.
Hoy explica el diario As los detalles del tema. Seguramente hoy se habrá enterado Chus Mateo, el entrenador del Real Madrid, de que el basket average lo tiene perdido con el Barça.