Carlos Muñiz Para Zinedine Zidane el clásico no tiene misterios, será el partido más plácido y sencillo de todos. No tendrá que esforzarse mucho para mentalizar a sus jugadores, que esperan como motos este partido para dejar LaLiga sentenciada. Por otra parte, no tiene dudas, no necesita hacer pruebas. Tiene la alineación decidida y sólo le falta realizar un par de ensayos tácticos en el entrenamiento de mañana para apuntalar la estrategia ante el Barcelona en función a las cualidades de los jugadores que tendrán delante. Zidane ha despejado todas sus dudas y ya tiene alineación para el clásico. No le va a dar más vueltas. Jugarán de salida Keylor Navas en la portería; Carvajal, Sergio Ramos, Varane y Marcelo en la defensa; Modric, Casemiro y Kovacic en el centro del campo; y delantero Lucas Vázquez, Benzema y Cristiano Ronaldo. El jugador número doce será Isco, que estará presto a saltar al terreno de juego especialmente si el resultado se torciera. La prueba de Casemiro ante la Cultural Leonesa fue un éxito y Zidane no tiene dudas. Isco saltará de la alineación inicial porque para el clásico Zidane prefiere la fuerza de Casemiro para ganar enteros en la faceta de destrucción del juego del rival. Zidane ya ha hecho los deberes y se presentará en el Camp Nou con las ideas muy claras. Ni siquiera habrá un marcaje especial para Leo Messi. Como ya ha sucedido en las últimas visitas del Real Madrid al Camp Nou (lleva cuatro partidos seguidos sin marcarle al Real Madrid), el equipo blanco trabajará en la tarea de desactivarle impidiendo que le lleguen balones en buenas condiciones, y recibirá el marcaje zonal en función de por donde se mueva. El objetivo es que se marque solo cortándole todos los circuitos que puedan llegar hasta él.
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