El FC Barcelona no cerrará el ejercicio económico todo lo bien que esperaba. Según ha informado La Vanguardia, el cuadro catalán está en negociaciones para conseguir un nuevo crédito de hasta 100 millones de euros, evitando de esta manera acabar con pérdidas y seguir en buenas condiciones para volver a la regla del 1:1 para realizar contrataciones de vital importancia en verano.
Durante la Asamblea de Compromisarios celebrada el pasado octubre de 2023, el Barcelona aprobó un presupuesto de 859 millones de euros, con unos beneficios limpios de 11 millones. A pesar de esto, el escenario más probable en la actualidad es que el equipo azulgrana cierre el ejercicio con pérdidas, dependiendo de qué termine sucediendo con el crédito que se está negociando.
La intención es ampliar los ingresos antes de cerrar el ejercicio económico para compensar la bajada de ingresos que ha habido por parte de Nike y de las dificultades que está habiendo para encontrar un sustituto para la palanca de Barça Studios que Libero se comprometió a pagar y no ha abonado hasta el momento.
Independientemente del crédito que se está negociando, el Barça todavía se encuentra a la espera de recibir los 100 millones que debería pagar Libero el próximo mes de junio, como está acordado en el contrato. Esta cantidad se considera “fundamental” para que el ejercicio no termine con pérdidas, algo que en la actualidad parece extremadamente complicado.
Nike puede salvar al Barça
El contrato que firmó Bartomeu para renovar con Nike años atrás ha supuesto un absoluto varapalo económico para el Barça. Aceptó unas cláusulas por las que el club catalán, de tener malos resultados deportivos, iría cobrando menos dinero por su camiseta, hasta el punto de que esta campaña la cantidad ha descendido hasta prácticamente los 50-60 millones de euros.
Mientras tanto, Laporta está ultimando un nuevo acuerdo para seguir de la mano de Nike, por el que el Barcelona pasaría a cobrar unos 120 millones por temporada e ingresaría de manera inmediata otros 100 millones de euros en concepto de bonus, que resultarían claves para volver a la regla del 1:1 y actuar con normalidad en el próximo mercado de traspasos.