El FC Barcelona ha tenido dificultades durante años para encontrar sustitutos de calidad a sus icónicos laterales. Lejos quedan las épocas doradas de Éric Abidal y Jordi Alba en la banda izquierda, y de Dani Alves en la derecha. Desde entonces, el club se embarcó en una búsqueda prolongada y costosa para encontrar laterales de nivel.
En las últimas temporadas, el Barça ha hecho un importante esfuerzo económico para encontrar nuevos talentos. Sin embargo, los resultados no siempre han sido los esperados. Jugadores de la talla de Marc Cucurella y Alejandro Grimaldo, formados en La Masia, abandonaron el club. No tuvieron minutos ni oportunidades y ahora son considerados como de los mejores del mundo en su posición.
Alejandro Balde, amo de la banda izquierda
Actualmente, los culés parecen haber encontrado estabilidad en estas posiciones con Alejandro Balde y Jules Koundé. Balde se ha consolidado en la banda izquierda, destacando por su capacidad ofensiva y velocidad. Koundé ha asumido el rol de lateral derecho, aportando solidez y calidad defensiva. A pesar de este éxito, persiste la crítica sobre la gestión de talentos de la cantera.
Para evitar que se repita la historia de jugadores como Cucurella y Grimaldo, el Barça ha puesto el foco en Álex Valle. Este joven lateral zurdo, de solo 20 años, está cedido al Celtic de Glasgow, donde ha mostrado un rendimiento sobresaliente.
Valle ha captado la atención del cuerpo técnico de Hansi Flick gracias a su capacidad para sumarse al ataque y su seguridad defensiva. En el equipo escocés ha jugado tanto en la liga doméstica como en la Liga de Campeones. Valle se ha ganado un puesto de titular y está demostrando su valía en un contexto de alta competencia.
El Barcelona sigue de cerca su evolución, consciente de la necesidad de contar con un recambio de calidad para Balde. Si Valle continúa destacando, es probable que regrese al club la próxima temporada para competir por un puesto en el primer equipo. Esto reforzaría la posición de lateral izquierdo y daría al Barça una opción sólida nacida de su cantera. Y esta es una estrategia que ha demostrado ser rentable y que añade valor al proyecto deportivo del club.
De cara al futuro, el Barça de Laporta y Flick parece decidido a no repetir los errores del pasado. Con Álex Valle, la intención es garantizar que los talentos formados en casa puedan brillar en el primer equipo, como lo han hecho Balde y otros antes.