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Fornals plantó cara al madridismo radical mediático

Fornals planta cara al madridismo sociológico cuestionando al intocable Mbappé

Fornals deja sin habla de José Luis Sánchez, de El Chiringuito, tras el Real Madrid-Betis

La pregunta tópica de José Luis Sánchez, el madridista visceral de El Chiringuito, esperando la ovación del entrevistado, en este caso Pablo Fornals.

Pero el tertuliano radical de El Chiringuito se quedó pasmado con la respuesta del futbolista bético.

¿Mbappé imparable? El zasca antológico

"Tenía que ser contra vosotros cuando se estrenara Mbappé. ¿Es imparable?"

Esa era la pregunta de José Luis Sánchez, de El Chiringuito. Y esperando la confirmación del jugador del Betis: "Sí, es imparable, no hay otro como él".

Pero lo que escuchó no se lo esperaba este parcial opinador ejerciendo de reportero. Fornals se salió del pensamiento único a cuatro puntos:

"Pues no lo sé. Si fuera imparable habría metidos goles desde el primer día". Zasca antológico del jugador del Betis al reportero madridista.

La respuesta no gustó al corrillo que se formó en torno a Fornals. Y apareció un espontáneo del madridismo sociológico sector mediático para poner los puntos sobre las íes.

"¿Me vas a preguntar del Betis o solo de Mbappé?"

"Mbappé ya anotó en su primer partido como jugador del Real Madrid en la Supercopa de Europa".

Y Fornals, alucinado, no podía creer el fanatismo mbappeniano, a cuatro puntos, que tenía delante. ¿Periodistas o forofetes?

"Pues muy bien. ¿Me vas a preguntar por el Betis o sólo por Mbappé?", respondió muy enfadado el jugador del Betis.

Mientras, el periodista de bufanda blanca trataba de arreglarlo excusándose.

"Para que veas lo que miro el Madrid". Así zanjó el asunto Fornals.

Los mismos que llevan siete años insultando a Mbappé

Los mismos que se han pasado siete años criticando e incluso insultando a Mbappé, no soportan ahora que alguien les lleve la contraria y no aplauda con las orejas a Mbappé.

Un Mbappé que, después de cuatro jornadas, está a cuatro puntos del Barça.

Y ha marcado  dos goles menos que Lewandowski, uno menos que Raphinha y los mismos que Dani Olmo, con un partido y medio.

Y, por supuesto, tirando del comodín del árbitro y el correspondiente penalti. Eso lo va a empezar a disfrutar ahora que el Real Madrid es su equipo y no el rival.