El Rey de Europa no falla. Tampoco en Múnich. El Real Madrid ha llegado al descanso del choque de ida de las semifinales de la Champions League en Múnich con ventaja de 0-1 gracias al gol logrado por Vinicius en el minuto 24.
El partido empezó con susto, porque el Bayern parecía dispuesto a comerse a su rival con un despliegue físico espectacular. La intensidad que los alemanes imprimían a su juego sorprendió a los madridistas, que se dedicaron a aguantar el chaparrón con orden en los primeros minutos de partido.
Con 15 minutos jugados, el Real Madrid aún no había disparado a puerta, mientras que el Bayern intentó seis disparos. Parecía que íbamos a vivir otro calvario como el último del Etihad Stadium.
Kroos y Vinicius tumban al Bayern
Pero no. El poderío del Bayern se desbravó como una gaseosa, el Real Madrid tomó el mando del partido y se igualó la posesión del balón, hasta que en el minuto 24 un balón de Kroos, magistral, deja a Vinicius solo ante Neuer al que bate con tranquilidad por bajo.
Era el cuarto gol de Vinicius en la presente edición de la temporada, el vigésimo en todas las competiciones.
Era el 0-1 que arreglaba la situación al Real Madrid. El Bayern quedó tocado. No entraba en sus cálculos encajar el 0-1 y el Real Madrid fue encontrándose, bien situado en el campo, obligando al Bayern a intentar la respuesta de forma desordenada.
El Bayern dejó de ser peligroso y el Real Madrid ha llegado al descanso muy tranquilo y con el partido controlado. Ahora se trata de resistir con orden en la segunda mitad esperando con acciones similares al 0-1 permitan al Real Madrid volver a sorprender al Bayern.