Las recientes declaraciones de Aurelien Tchouaméni han generado un notable impacto en el vestuario del club. Especialmente en un momento en que el equipo enfrenta importantes bajas debido a lesiones. En una entrevista desde la concentración de la selección francesa, Tchouaméni expresó su preferencia por jugar en el centro del campo.
Se trata de un comentario que ha causado sorpresa y estupor entre algunos de sus compañeros, sobre todo tras la lesión de Dani Carvajal y la baja de David Alaba.
|
Antonio Rüdiger, molesto
Uno de los jugadores que no entiende esta postura es Antonio Rüdiger. El defensor alemán considera que este no es el momento adecuado para que un jugador hable de sus preferencias individuales. La situación actual del equipo requiere de una mayor solidaridad y compromiso por parte de todos.
Con varios jugadores clave fuera de acción, el equipo necesita que todos los miembros del plantel estén dispuestos a sacrificarse. Es decir: si quieres jugar en el Real Madrid, si hace falta te pones los guantes de portero.
Las palabras de Tchouaméni, en las que afirma que "prefiero jugar en el medio", pueden interpretarse como un gesto egoísta en este contexto. Esto ha generado malestar dentro del grupo. En un equipo como el Real Madrid, donde la presión y la exigencia son constantes, declaraciones como estas pueden no ser bien recibidas, especialmente en momentos de dificultad.
No es de extrañar que esta situación haya despertado especulaciones sobre el futuro del futbolista francés en el club. A pesar de ser una de las incorporaciones más costosas en su momento, Tchouaméni ya no es considerado intransferible por la directiva del Real Madrid. Florentino Pérez ya hace tiempo que no está demasiado contento con el rendimiento del medio francés. Ahora, quizás tenga más motivos para pensar en una venta en verano.
Por su parte, Carlo Ancelotti, el técnico del Real Madrid, ha mostrado en el pasado su disposición a utilizar a Tchouaméni en posiciones defensivas en situaciones de emergencia. Aunque el jugador francés prefiere ocupar su posición natural en el centro del campo, es probable que el entrenador siga optando por colocarlo donde el equipo más lo necesite.
Lo que está claro es que el vestuario blanco necesita ahora ser más solidario que nunca. Sin Carvajal, con Alaba que no llegará hasta el 2025, toca apretar los dientes y remar a la vez. Si a Tchouaméni le toca jugar de central, pues a jugar.