Elon Musk enfrenta un momento complicado. No se trata solo de rumores o polémicas, sino de problemas reales que están afectando a Tesla. Estos retos podrían marcar un punto de inflexión en la trayectoria de la compañía en Estados Unidos.
Ventas en caída y una imagen deteriorada
Tesla reportó una caída del 13% en ventas globales durante el primer trimestre de 2025. Lo más preocupante llegó desde Europa, donde las ventas cayeron un 45%, justo cuando el mercado de vehículos eléctricos crecía un 15%.
Esta caída no solo es un golpe económico, sino también una señal clara de que Tesla está perdiendo terreno frente a la competencia. Los fabricantes chinos y europeos están aprovechando la oportunidad para ganar cuota de mercado.

Además, la revisión de los robotaxis por parte de la NHTSA añade incertidumbre sobre los planes futuros de la empresa.
La influencia negativa de la política en la reputación de Musk
La etapa política de Musk ha tenido un impacto inesperado y negativo. Su cercanía con figuras controvertidas y sus declaraciones públicas han generado rechazo en varios sectores.
Esto ha llevado a que antiguos clientes se alejen y nuevos potenciales compradores se lo piensen dos veces antes de elegir Tesla. La reputación del CEO se ha convertido en un factor que pesa sobre la marca, alejándola de sus valores originales de innovación y sostenibilidad.
La salida de Omead Afshar y la inestabilidad interna
Un golpe fuerte para Tesla fue el despido silencioso de Omead Afshar, mano derecha de Musk y pieza clave en la operación de la empresa. Afshar lideró proyectos importantes como el Model 3, la Gigafábrica de Austin y el proyecto Optimus.
Este movimiento, interpretado como un intento de Musk por mostrar cambios a los inversores, ha generado incertidumbre dentro de la compañía. No fue el único: otros ejecutivos también han abandonado Tesla, dejando una sensación de inestabilidad.
¿Puede Tesla recuperar su posición?
Tesla aún tiene las herramientas para salir adelante, pero debe actuar rápido. Separar la imagen de Musk de la marca será fundamental para reconectar con clientes y mercados.
La innovación tecnológica debe volver a ser el foco principal. Sin embargo, la competencia no espera. El mercado de vehículos eléctricos se vuelve cada día más competitivo, y Tesla necesita resultados concretos para mantener su liderazgo.
El futuro de Tesla en Estados Unidos dependerá de cómo manejen esta crisis interna y externa. Si no logran adaptarse, la posición de la compañía podría cambiar drásticamente en los próximos años.