Tesla se ha convertido en un referente global en el mundo del automóvil eléctrico. Bajo el liderazgo de Elon Musk, la marca ha crecido a pasos agigantados y ha consolidado su posición como líder del mercado. Sus modelos, su tecnología y su estrategia han marcado tendencia durante más de una década.
Sin embargo, un nuevo actor ha decidido irrumpir con fuerza en este terreno. Se trata de una inversión ambiciosa que lleva el respaldo de Jeff Bezos y que podría cambiar las reglas del juego. La competencia que se avecina promete ser intensa y amenaza con sacudir los cimientos del imperio construido por Elon Musk.

Slate Auto: la gran apuesta de Bezos
Jeff Bezos lleva tiempo invirtiendo en secreto en Slate Auto, una marca de vehículos eléctricos con sede en Michigan. Esta empresa fue creada en 2022 bajo el paraguas de Re:Build Manufacturing, otra firma propiedad del fundador de Amazon. Desde entonces, ha estado trabajando con bajo perfil, pero con una estructura sólida y una estrategia clara, según ha revelado TechCrunch.
Slate Auto ha logrado reunir una plantilla con experiencia en algunas de las marcas más importantes del sector automotriz. Entre los perfiles contratados figuran antiguos empleados de Ford, General Motors, Stellantis y Harley Davidson.

A nivel financiero, la empresa ha recaudado 111 millones de dólares en una ronda de inversión Serie A y otros 500 millones en una Serie. Gracias al respaldo de figuras influyentes como Mark Walter, propietario de los Dodgers de Los Ángeles, y Thomas Tull, principal inversor de Re:Build.
Con estos recursos, la empresa planea empezar a producir vehículos eléctricos a partir del próximo año. El lugar elegido sería una planta en Indianápolis. Todo apunta a que Bezos no está improvisando, sino que ha estructurado un proyecto serio y con aspiraciones de competir a gran escala.
Un modelo de negocio opuesto al de Tesla
A diferencia de Tesla, que ha apostado por el diseño exclusivo y los precios elevados, Slate Auto, quiere acceder al mercado masivo. Su estrategia se centra en producir modelos económicos que lleguen a un público más amplio. El primer vehículo que pretenden lanzar es una pick-up eléctrica de dos plazas, con un precio estimado por debajo de los 25.000 dólares.

Este enfoque podría marcar una diferencia importante, ya que los precios competitivos siguen siendo uno de los frenos a la adopción masiva de coches eléctricos. Para aumentar sus ingresos, la empresa también planea vender accesorios y ropa personalizada relacionada con sus vehículos. Incluso ya ha registrado el lema "Nosotros lo construimos, tú lo haces".
La llegada de Slate Auto, podría suponer un verdadero reto para Tesla, que hasta ahora ha tenido el liderazgo casi indiscutido en el sector. Con Bezos al mando y una propuesta bien financiada, Elon Musk tendrá que prepararse para una nueva etapa de competencia directa. El futuro del mercado eléctrico se vuelve más interesante que nunca.