Xavi Hernández se fue del Barça por la puerta grande en 2015 habiendo alzado como capitán Liga, Copa y Champions ese año. Tenía 35 años y podía haber seguido algún año más. Pero una fascitis plantar le echó del Barça.
El entrenador entonces era su amigo Luis Enrique. Y le hizo ver que no le convenía seguir en el Barça porque iba a jugar muy poco. Xavi sufría una fascitis plantar que le impedía jugar tres partidos seguidos.
Dani Olmo, como Xavi Hernández a los 35 años
Se fue a Qatar y allí alargó su carrera cuatro años más, hasta 2019, en una competición de menor exigencia.
El problema físico le llegó a Xavi en el final de su carrera. Pero en una situación similar se encuentra Dani Olmo. La diferencia es que éste acaba de fichar por el Barça, solo tiene 26 años y se encuentra en el mejor momento de su carrera.
Pero su historial médico es preocupante y ha disparado las alarmas en el Camp Nou. Como Xavi en su momento, no puede jugar tres partidos seguidos. Y Flick debe dosificarle para evitar que se rompa.
Olmo no jugó ni un solo minuto ante el Las Palmas. Y en Mallorca fue sustituido en el minuto 72 por Frenkie De Jong, que aprovechó muy bien su oportunidad.
El último fichaje blaugrana presenta una predisposición especial a las lesiones. La última fue una sobrecarga en el pubis. Pero solo es la última de un preocupante historial médico.
345 días de baja en los últimos tres años
14 lesiones en los últimos cuatro años, entre Leipzig y FC Barcelona. En las últimas tres temporadas ha estado 345 días de baja y se ha perdido 68 partidos.
Desde que está en el Barça ha estado 41 días de baja y se ha perdido 8 partidos por problemas físicos. El último percance, por problemas en el pubis. Antes, por molestias en los isquiotibiales.
La temporada pasada, siendo aún jugador del Leipzig, estuvo 147 días de baja repartidos entre tres lesiones. Se perdió 29 partidos, lo que le llevó a brillar en una Eurocopa a la que llegó pletórico.
Hace dos temporadas estuvo 98 días de baja y se perdió 20 partidos, también por tres lesiones. En la temporada anterior fueron 100 días de baja y 19 partidos perdidos.
De hecho este verano ya llegó lesionado al Barça y durante la temporada solo ha podido jugar de forma intermitente entre lesión y lesión.
El Barça busca soluciones. Su rendimiento es excelente cuando juega. El problema es que juega menos de lo que el club desearía.