La decisión está tomada. El futuro de Xavi Hernández está en el Barça y él será el entrenador del equipo blaugrana la próxima temporada.
Dos factores han influido decisivamente en la decisión que anoche tomó Xavi Hernández y que cuenta con la bendición del presidente Joan Laporta.
El Barça vuelve a ser competitivo
Por un lado, el cambio experimentado por el equipo. Cierto que el Barça cerrará la temporada en blanco, sin títulos. Pero también lo es que el equipo ha competido y si no ha tenido opción a los títulos ha sido por el efecto de factores externos.
En la Champions League el Barça contaba con dos goles de ventaja en su eliminatoria de cuartos de final ante el PSG a falta de una hora. Pero la cuestionable expulsión de Araujo lo cambió todo.
Ayer en el Bernabéu el Barça tiró LaLiga, pero plantando cara al Real Madrid y superándole en el terreno de juego. Solo el gol mal anulado, el penalti mal señalado y los dos penaltis en el área blanca que no quiso pitar el árbitro De Soto Grande impidieron la victoria del Barça.
Laporta tiene claro que el Barça vuelve a ser competitivo, una virtud que no le adornaba cuando Xavi llegó al club hace dos años y medio. El equipo es joven y su futuro es enorme. A Xavi le sabe mal dejar el club sin concluir su ciclo y Laporta también desea que sea él el técnico del futuro.
El dinero también influye
Pero hay otro factor que ha resultado decisivo. La alternativa de Rafa Márquez no convence a nadie. Es muy amigo del presidente, pero se le ve muy verde para asumir la responsabilidad del primer equipo del Barça.
El club ha barajado otros nombres, como los de Flick, Naggelsmann, Tuchel o De Zerbi, pero todos ellos son muy caros y no están al alcance de la actual economía del club.
No había más alternativa que Márquez y su opción generaba muchas dudas.
Y Laporta ha optado por seguir contando con Xavi como entrenador del Barça. Es la solución más práctica y rentable.
Quedaba la duda de si el propio Xavi estaría interesado en seguir, pero nada le apetece más que acabar su obra en el Barça, que en este momento está inconclusa.