Josep Pedrerol siempre ha demostrado no tener ningún tipo de problema en ponerse la careta y hacer ver que es seguidor del Barça. Todo el mundo sabe de su madridismo, pero esto no le causa ningún tipo de problema a la hora de venderse de cara al público. Tras la contundente victoria contra el Borussia Dortmund (4-0) en la Champions League, el presentador de El Chiringuito ha vuelto a hacer su particular espectáculo, 'vistiéndose' de blaugrana.
El Barça, a por el triplete
Iniciado el programa de El Chiringuito posterior al Barça-Dortmund, Josep Pedrerol ha hecho su particular show. No ha podido ocultar el gran juego culer, transformado en una victoria que sirve para poner pie y medio en las semifinales de la Champions. Hablando del encuentro, el catalán ha dicho: "Este Barça cree en el triplete. Lo cree que verdad. Juega de maravilla, disfrutemos".
A pesar de su mensaje, es visible que Pedrerol no está 'disfrutando' mucho con este Barça. Hansi Flick le ha cambiado por completo la cara al equipo y ha hecho que todo el madridismo esté tocado y hundido. El presentador de El Chiringuito disfrutaba más cuando al Barcelona le iban mal las cosas y 'descendía' hasta la Europa League, donde tampoco lograba ganar.

Este Barça está ofreciendo otra imagen y es el gran favorito para ganar la Champions League, dando una gran imagen partido tras partido. Parece un equipo imbatible, y la verdad es que lo está siendo en este 2025, no habiendo perdido todavía ningún encuentro. El peor resultado, hasta el momento, es el del empate, lo que le permite estar vivo en Liga, Champions y Copa.
Prudencia en el Barça
En cualquier caso, en el Barça tienen claro que no van a caer en la trampa. Un mal partido puede cambiarlo todo y enviar todo el trabajo hecho hasta ahora a la basura. Existe calma total en el club, que traslada el mensaje de "partido a partido", como diría Simeone. El triplete es posible, pero igual de posible es terminar la campaña sin ganar nada.

La situación en la Liga es buena, pero solo hay 4 puntos de ventaja. Los cuartos de final de la Champions League parecen encarrilados, pero en unas teóricas semifinales tocaría jugar ante Bayern o Inter. Y en la Copa, el Real Madrid tendrá sed de victoria: se decide todo a un partido, en el que todo será posible. El Barça confía, pero mantiene la prudencia.