El FC Barcelona y Oriol Romeu han puesto fin a su relación contractual en los últimos días del mercado de fichajes. El acuerdo, según ha podido saber Madrid-Barcelona, se cerró de manera discreta: el mediocentro y el club rescindieron el contrato que les unía hasta 2026, con el Barça pagando parte del salario pendiente. Sin embargo, ni el jugador ni la entidad azulgrana han comunicado oficialmente la operación.
A sus 34 años, Romeu ha quedado libre para elegir su destino, aunque la sensación es que su carrera entra en una fase muy complicada.
El Girona, una puerta cerrada
El propio Romeu esperaba poder volver al Girona, donde ya jugó en calidad de cedido la pasada temporada, pero el conjunto catalán no ha querido apostar de nuevo por él. Esa negativa deja al mediocentro en una situación incómoda, sin un equipo que le garantice continuidad en LaLiga. El mercado internacional podría abrirle alguna oportunidad, pero a día de hoy no hay nada avanzado.
Trayectoria marcada por su solidez
Romeu ha tenido una carrera longeva y con experiencia en varias ligas europeas. Formado en La Masía, debutó con el primer equipo del Barça en 2010 antes de fichar por el Chelsea, donde permaneció varias temporadas, incluyendo cesiones al Valencia y al Stuttgart.
Su mayor etapa de estabilidad llegó en el Southampton, donde disputó más de 250 partidos entre 2015 y 2022, consolidándose como uno de los mediocentros más fiables de la Premier League. Posteriormente, regresó al Girona, firmando una gran campaña en Montilivi que le valió para regresar al Barça en 2023. Sin embargo, en el Spotify Camp Nou nunca terminó de encajar en la rotación y Flick no contaba con él.
Una salida sin despedida del Barça
Lo más llamativo de esta situación es la ausencia de despedida. El Barça no ha realizado ningún comunicado de agradecimiento hacia Oriol Romeu, algo que fuentes de Madrid-Barcelona confirman que no está previsto. Una decisión que sorprende, teniendo en cuenta que el mediocentro es canterano y volvió al club tras más de una década fuera.
Este detalle deja entrever que su salida no ha sido del todo satisfactoria para ninguna de las partes. El club buscaba liberar salario y ficha, mientras que el jugador esperaba otro tipo de trato.
Un futuro en el aire
Con 34 años y libre en el mercado, Oriol Romeu deberá valorar qué camino seguir. Su perfil de mediocentro defensivo sigue siendo útil para equipos que busquen experiencia y equilibrio, pero la edad juega en su contra. Opciones en ligas menores o incluso en destinos exóticos podrían abrirse en las próximas semanas.
De momento, el silencio del Barça y la falta de ofertas claras marcan un panorama gris para un jugador que lo dio todo en su regreso, pero que se marcha sin reconocimiento del club que le formó.