Pablo Espinosa no ha querido quedarse callado. El periodista ha testificado en el juicio entre Siro López y Josep Pedrerol, dejando en mal lugar al presentador de El Chiringuito. De Pedrerol ha destapado un "trato vejatorio", constatando delante de un juez las supuestas malas prácticas que lleva a cabo el periodista catalán.
Después de la reciente denuncia que le ha puesto Pedrerol a Siro López, Pablo Espinosa ha expuesto delante de un juez cómo fue su experiencia como trabajador de El Chiringuito.
Entre junio y agosto de 2021 entró como becario, pero en septiembre se hizo con un puesto fijo como editor del programa... hasta que terminara dimitiendo en febrero de 2022, es decir, pocos meses más tarde.
"No había día en que no te echase la bronca"
En su declaración ante el juez, Espinosa ha arrancado diciendo: "Esas vejaciones, ese mal ambiente o ese maltrato generalizado eran tanto en persona como online. Mi puesto era el de editor, que en un medio de comunicación normal es como el jefe de redacción".
"En 'El Chiringuito' hacía de jefe de redacción, preparaba las escaletas y además hablaba durante el programa con él. Pero verdaderamente yo estaba ahí para parar golpes".
En este sentido, ha continuado: "No había día en el que Pedrerol no te echase la bronca con frases como: 'No vales', 'Ya hablaremos en el futuro'. Como amenazas de: 'Ya hablaremos, porque te voy a echar', pero nunca te echaba. No conozco a nadie al que haya echado. Todo el mundo dimitió".
No se ha quedado solo aquí el periodista, aseverando: "Frases como 'Eres un inútil', 'No te enteras', 'Te están pintando la cara'... Me decía siempre que el editor de 'Jugones', que es una persona que verdaderamente era editor y que tenía cuarenta años y mucha experiencia".
"Me pintaba constantemente la cara y que era mucho mejor que yo. Lógicamente lo era, llevaba veinte años de experiencia".
"Me decía: 'Me estás jodiendo el programa', 'Te has cargado el programa', 'Va a llamar Felipe del Campo para darte las gracias'... Eso era el día a día", ha seguido explicando Pablo Espinosa.
"Pareces autista"
Continuando, ha recordado otras dimisiones: "Todo esto conllevó que, aunque estaba muy bien remunerado y yo con 24 años cobraba 3.300 euros netos, me hacía ir con miedo y terror".
"En la misma semana dimitieron tres personas: Fermín Canas, Manolo Salvanés y Borja Velasco", ha dicho.
"Al final de esa temporada también dimitieron dos personas más y seis meses antes que yo dimitió una persona que antes tenía mi puesto. A la que se le llegó a decir, que lo escuché por el pinganillo: 'No contestas nunca Borja, pareces autista'", ha seguido.
"Recuerdo miedo, temor, pavor..."
Respondiendo a las preguntas del abogado de Pedrerol, Pablo Espinosa ha recordado cómo era la jornada laboral del presentador: "Él solía llegar a las 20:45. Era cuando tenía que bajar junto al resto, sentarme al lado de él y contarle el programa que habíamos pensado".
"Ese momento para mí era el absoluto infierno, porque era el momento en el que de forma directa y delante de tus compañeros te iba a humillar. Recuerdo miedo, temor, pavor. Y eso aún se agrandaba más a las 23:30", ha apuntillado.
"El programa empieza a las 00:00 y cuando Pedrerol volvía de cenar teníamos una reunión, que muchas veces sucedía en su camerino mientras se maquillaba", ha iniciado.
Ese momento para mí era el absoluto infierno. Recuerdo a las 23:20 cuando ya veía que me iban a avisar de que iba a llegar, mirar con temor el móvil o querer apagarlo. Porque el mensaje de 'Pablo, baja' significaba que los próximos quince minutos iban a ser de ganas de vomitar", ha afirmado.
"Amenazó siempre con despidos"
Ejemplificando cómo es trabajar para Pedrerol, ha hablado de un excompañero: "Una vez alguien dijo por WhatsApp: 'Es que ya se ha acabado mi turno'".
"Y Pedrerol puso: '¿Turnos? No quiero oír jamás esa palabra. Lo de tener horarios de funcionario no me gusta. Algunos os estáis retratando solos. Qué fácil va a ser tomar decisiones'".
"Y era simplemente porque una persona que tenía Covid en ese momento le había dicho que su turno ya había sido el viernes, que el sábado era su día libre. Y Pedrerol amenazó como siempre con despidos", ha terminado.