El Real Madrid atraviesa un momento delicado con Dani Carvajal. El lateral madrileño es uno de los referentes del equipo, pero su estado físico genera preocupación.
Tras una lesión de larga duración, el club teme que pueda recaer si no se dosifica bien. Carvajal ya ha empezado a disputar minutos, pero cada paso se mira con lupa.
Contra el CA Osasuna jugó solo unos minutos como relevo de Alexander-Arnold, fue suficiente para recuperar sensaciones sobre el césped. Luego, frente al Real Oviedo, fue titular y completó un partido más exigente. Poco a poco, va acumulando rodaje, pero en el club saben que hay que ir con cuidado.
Una gestión medida
A sus 33 años, Carvajal debe cuidar su físico, cada partido y cada entrenamiento cuentan. La idea es que recupere confianza sin arriesgarse a una recaída. El golpe que sufrió contra Osasuna ante Catena no pasó a mayores, pero sirvió de aviso: la prudencia es clave.

El lateral ha demostrado profesionalidad y compromiso. Continúa trabajando duro y se adapta a los planes del cuerpo técnico. Su experiencia permite leer los partidos con inteligencia, pero la fatiga puede jugar en su contra si no se controla.
La motivación de la competencia
La llegada de Alexander-Arnold ha cambiado el panorama en el lateral derecho, Carvajal lo ha tomado como un estímulo. La competencia le motiva a mantenerse al máximo nivel. Sabe que el inglés es un jugador de gran calidad, pero también que su experiencia puede marcar la diferencia en determinados momentos.
El Real Madrid dispone ahora de dos perfiles muy distintos en la banda derecha, Alexander-Arnold es técnico y tiene una salida de balón excelente. Carvajal, en cambio, aporta intensidad y recorrido constante. Xabi Alonso puede alternarlos según el partido, esta diversidad es un lujo para el equipo.
La visión de Xabi Alonso
Xabi Alonso valora a ambos jugadores. La combinación de Carvajal y Alexander-Arnold ofrece soluciones distintas para cada situación. Además, ambos cuentan con el apoyo de Mastantuono y Brahim Díaz por delante, esto añade más recursos tácticos al equipo.
Para Alonso, tener alternativas de calidad en la misma posición es un alivio, pero también un reto. Debe equilibrar la necesidad de minutos de Carvajal con la frescura de Alexander-Arnold. La clave está en la gestión de esfuerzos y en evitar riesgos innecesarios.
Mirando al futuro
El mensaje en el club es claro: paciencia y cuidado, Carvajal tiene mucho que aportar, pero debe ir paso a paso. La competencia le obliga a estar alerta y a mantener su mejor versión. Por ahora, los entrenadores y el cuerpo médico están atentos a cualquier signo de alerta.
Si se gestiona bien, Carvajal podrá volver a ser una pieza clave en el Real Madrid. Su experiencia, intensidad y compromiso siguen siendo indispensables. Pero la palabra de orden es prudencia: cada minuto cuenta, y la salud del jugador está por encima de todo.