Raúl González ha sonado para multitud de clubes desde que tomara la decisión de abandonar el Real Madrid. Con la llegada de Xabi Alonso al primer equipo, vio escapar definitivamente su sueño de sentarse en el banquillo del Santiago Bernabéu. Estando como estaban las cosas, optó por dar un paso a un lado y abandonar el Castilla con la intención de 'ascender' e ir a un club de mayor nivel.
Ha tenido varias propuestas importantes, pero hasta el momento parece que ninguna ha terminado de convencerle. No obstante, ahora todo habría cambiado con la última hora que ha llegado desde Alemania.
Erik ten Hag, despedido
Ha sido sorprendente la resolución que ha tomado el Bayer Leverkusen. Después de poco tiempo al cargo siendo el sucesor de Xabi Alonso, Erik ten Hag ha terminado siendo despedido. Así ha sido tras un mal arranque de Bundesliga, empatando un partido y perdiendo otro.

Esto le ha costado el puesto, habiendo dejado además un vestuario muy tocado. Nadie confiaba en él y su método y se ha decidido cortar por lo sano.
Raúl González, el elegido del Bayer Leverkusen
Ahora mismo, el Leverkusen ha iniciado un proceso para encontrar a su relevo. Y parece que el primero de la lista es el propio Raúl González, al que ven como el candidato ideal.
Raúl cumple con todos los requisitos que está buscando el Bayer Leverkusen, viéndole además como una figura muy similar a la de Xabi Alonso. El español dejó un gran sabor de boca allí y quieren repetir la experiencia con alguien al que califican 'de su misma cuerda'.
Tras la corta y mala etapa de Ten Hag, en Leverkusen no quieren fallar y consideran que la mejor opción está en España. Hay varios candidatos encima de la mesa, pero Raúl González gusta y convence por varias razones que le hacen destacar por encima del resto.
ADN formador
El paso de Raúl por la cantera del Real Madrid ha sido más que notable. Comenzó su andadura como técnico en 2018, dirigiendo al Cadete B y posteriormente al Juvenil B. En 2020, con el Juvenil A, levantó la UEFA Youth League, demostrando su capacidad para competir y formar a la vez.

Desde entonces, ha estado al frente del Castilla, donde ha trabajado con varias de las jóvenes promesas del club blanco. Ha conocido la presión de entrenar al segundo equipo del Madrid y ha demostrado tener un carácter firme, pero cercano.
Ese perfil encaja perfectamente con la filosofía del Bayer Leverkusen: exigencia, formación y proyección.