El Real Madrid llega al inicio de LaLiga 2025/26 con un aire renovado. Bajo la dirección de Xabi Alonso, el equipo ha trabajado con intensidad durante la pretemporada. El Mundial de Clubes y varios amistosos sirvieron para afinar automatismos y ajustar el ritmo competitivo.
El objetivo es claro: mantener la superioridad de la pasada temporada y adaptarse al nuevo estilo. Alonso ha insistido en presionar como bloque, recuperar el balón rápido y reforzar la solidaridad defensiva. Los jugadores parecen receptivos, cada entrenamiento es una pequeña batalla para ganarse un puesto en el once titular.
Fichajes que marcan la diferencia
El club ha reforzado su plantilla con jóvenes promesas y jugadores con experiencia. Destacan Dean Huijsen, Trent Alexander‑Arnold, Álvaro Carreras y Franco Mastantuono, cada uno aporta algo distinto. Huijsen es solidez defensiva; Alexander‑Arnold, ataque por banda y visión de juego; Carreras, juventud y proyección; Mastantuono, creatividad y desequilibrio.
La pretemporada sirvió para integrarlos, algunos, como Huijsen y Alexander‑Arnold, ya debutaron en el Mundial de Clubes y mostraron buena adaptación. Otros, como Mastantuono, todavía están en proceso de acoplarse al ritmo del equipo. La ventaja es clara: el Madrid llega a la Liga con piezas nuevas que ya conocen su sistema.
Un inicio complicado para Osasuna
Con este panorama, el debut de Osasuna en la Liga se presenta como un reto mayúsculo. Alessio Lisci, el nuevo técnico, comenzará su etapa enfrentando al campeón en el Santiago Bernabéu. El italiano reconoce la dificultad: Osasuna no vence al Madrid en Chamartín desde 2011 y la historia pesa.
Lisci sabe que su equipo tiene que competir con inteligencia, no se trata solo de defender, sino de aprovechar cualquier oportunidad. Para todos los rojillos, ganar allí sería un hito histórico. La presión es alta, pero también la motivación, cada entrenamiento cuenta, cada detalle puede marcar la diferencia.
Lisci y la montaña de la ventaja de Alonso
El mensaje de Lisci es realista: Xabi Alonso juega con ventaja. Su Madrid llega con ritmo competitivo, fichajes integrados y un estilo ya definido. La plantilla es de alto nivel, capaz de resolver partidos con talento individual y colectivo.
Sin embargo, Lisci no se amilana, su estrategia se basa en trabajo, concentración y confianza en sus jugadores. “Sabemos que será difícil, pero con preparación podemos dar buena imagen”, afirma. La montaña es alta, pero la ambición de Osasuna no conoce límites y aunque la historia favorezca al Madrid, el fútbol siempre guarda espacio para la sorpresa.