El Real Madrid afronta su debut en la Liga con una decisión que ha generado debate interno y externo. Tras semanas de especulaciones sobre la delantera blanca, Xabi Alonso se ha decantado por una opción que no estaba en todas las quinielas, pero que responde a criterios de rendimiento inmediato.
Los focos estaban puestos en Rodrygo, señalado como uno de los posibles sacrificados en el nuevo proyecto. Y también en Franco Mastantuono, la joya argentina que ha ilusionado al madridismo desde su llegada.
Sin embargo, el técnico ha preferido apostar por una figura que conoce bien lo que significa vestirse de blanco. Y que se ha ganado cada oportunidad con esfuerzo y discreción.
Brahim se queda con el puesto en la derecha
Xabi Alonso ha decidido otorgar la titularidad a Brahim Díaz en el estreno liguero de hoy frente a Osasuna. El malagueño ocupará el extremo derecho del ataque, acompañando a Kylian Mbappé y Vinícius Júnior en la tripleta ofensiva.
La apuesta no es casual. Brahim ha mostrado un gran nivel en la pretemporada, aportando dinamismo, sacrificio defensivo y capacidad de asociación.
El cuerpo técnico valora especialmente su compromiso y su disposición táctica. Son dos aspectos que han inclinado la balanza frente a otras alternativas más mediáticas pero menos estables.
Rodrygo, gran damnificado del plan
La suplencia de Rodrygo confirma que el brasileño atraviesa un momento delicado. Pese a haber sido titular en etapas anteriores, el nuevo entrenador no termina de encontrarle un encaje claro junto a Mbappé y Vinícius.
La decisión aumenta las dudas sobre su futuro, en un verano en el que su nombre ha estado vinculado a posibles salidas. Para el club, mantenerlo significa asegurar un jugador de talento probado, pero en lo deportivo Xabi Alonso no le ve ahora mismo como pieza prioritaria.
Mastantuono tendrá que esperar
En cuanto a Franco Mastantuono, la joven promesa argentina, el estreno liguero llega demasiado pronto para él. El club trabaja con calma en su adaptación y entiende que no conviene precipitar su protagonismo.
El futbolista tiene condiciones especiales y un futuro prometedor, pero Alonso no quiere cargarle con una responsabilidad excesiva en un contexto tan exigente. El plan es que vaya entrando poco a poco, sumando minutos sin la presión de ser decisivo en cada partido.
Una señal clara de Xabi Alonso
El técnico ha querido enviar un mensaje claro: en su Real Madrid jugarán quienes estén mejor preparados para responder a las necesidades del equipo, independientemente de nombres, precios o expectativas mediáticas. Brahim representa ese perfil de jugador trabajador, disciplinado y consciente de su rol.
De esta manera, la tripleta ofensiva para el debut liguero será Vinícius a la izquierda, Mbappé en el centro y Brahim en la derecha. Un once que combina talento, velocidad y sacrificio, y que deja fuera a dos de los jugadores más comentados del verano.