Kylian Mbappé es un joven veterano. A pesar de su juventud, ha demostrado ser un jugador que sabe mantener la cabeza fría en los momentos más tensos. Desde que deslumbró al mundo con el Mónaco, ha estado en el foco mediático, pero ha aprendido a no dejarse llevar por las emociones.
Su objetivo siempre ha sido claro: que se hable de él por su fútbol, no por polémicas. Este enfoque profesional le ha permitido consolidarse como uno de los mejores jugadores del mundo. Ahora, en el Real Madrid, Mbappé está decidido a usar su influencia en el vestuario para transmitir esta misma mentalidad. Sobre todo a los más jóvenes, como Endrick.
Kylian Mbappé aconseja a Endrick
Recientemente, Mbappé ha decidido intervenir tras los últimos incidentes que involucraron a Endrick, la joven promesa brasileña. Durante un partido contra el Alavés, Endrick no fue expulsado de milagro tras golpear a un rival. Se trata de un comportamiento que Mbappé considera inaceptable para un futuro jugador del Real Madrid. E
Este no es el primer episodio preocupante, ya que en un amistoso entre Brasil y España, Endrick agredió a Marc Cucurella. Mostró nuevamente su dificultad para controlar su temperamento.
Mbappé, que entiende perfectamente la presión que conlleva estar en el ojo público desde muy joven, ha hablado con Endrick. Lo ha hecho para hacerle ver las consecuencias de estos actos. Le ha explicado que, si sigue por ese camino, podría cerrarse la puerta de su futuro en el Real Madrid. Este es un club que demanda el máximo profesionalismo dentro y fuera del campo.
El ejemplo de Kylian Mbappé y Bellingham
Mbappé no solo predica con palabras, sino con su propio ejemplo. Desde que llegó al Real Madrid, ha demostrado una enorme madurez, gestionando las expectativas y la presión con serenidad. Aunque sigue siendo una figura mediática, ha sabido evitar conflictos y polémicas.
En este sentido, su comportamiento es similar al de Jude Bellingham. El otro joven talento también ha optado por dejar que su fútbol hable por él. Ambos representan una nueva generación de jugadores que, a pesar de la constante atención, se enfocan en su rendimiento en el campo.
Mbappé ha querido que Endrick entienda que formar parte de un club como el Real Madrid no solo exige talento. Implica también disciplina y cabeza fría. Sabe que las emociones mal gestionadas pueden perjudicar su futuro, y está dispuesto a guiar al joven brasileño para que no cometa más errores.
La intervención de Mbappé es una muestra de su creciente liderazgo en el vestuario del Real Madrid. A sus 25 años, es consciente de la importancia de formar a los más jóvenes no solo en lo futbolístico, sino también en lo personal. Sabe que Endrick tiene un futuro brillante por delante, pero también que es crucial que el joven aprenda a controlar su temperamento.