Dani Ceballos no lo tiene fácil en el Real Madrid, su situación sigue en el aire. A pesar del interés de Xabi Alonso en contar con él para la próxima temporada, los obstáculos no dejan de crecer. El último: el regreso anticipado de Eduardo Camavinga.
Ceballos pelea por un sitio en la plantilla, pero cada vez parece más cuesta arriba. Con un centro del campo tan competitivo, cualquier detalle marca la diferencia. Y Camavinga ha dado un paso adelante.
Camavinga, más cerca de reaparecer
El club blanco ha confirmado que Camavinga ya trabaja parcialmente con el grupo. Una noticia que, hace apenas unas semanas, parecía muy lejana. Su recuperación va por buen camino, y en el vestuario ya no descartan que tenga minutos en el Mundial de Clubes.

El primer partido será contra el Pachuca, y la posibilidad de ver al francés en acción ya no es remota. En Valdebebas reina el optimismo. La evolución física del jugador ha sido sorprendente y eso cambia por completo el panorama.
Un rival directo para Ceballos
La vuelta de Camavinga es, sin duda, una gran noticia para el Real Madrid… pero no tanto para Ceballos. Ambos ocupan roles similares en la medular, y con el francés de vuelta, las opciones del andaluz vuelven a reducirse.
Ceballos no ha conseguido consolidarse como titular, y esta temporada tampoco ha tenido demasiada continuidad por las lesiones. El regreso de un Camavinga en forma pone en peligro su ya frágil posición.
Xabi Alonso, clave en el futuro del francés
Desde la directiva y el cuerpo técnico creen firmemente en Camavinga. Por calidad y proyección, lo consideran uno de los mediocentros con más futuro del mundo. Solo necesita ese punto de madurez táctica, y ahí es donde entra Xabi Alonso.

El nuevo entrenador tiene claro que puede moldear al francés, quiere potenciar su lectura de juego y su disciplina táctica. Si lo logra, Camavinga puede ser una pieza clave durante muchos años. Y eso, por supuesto, complica aún más las cosas para Ceballos.
Camavinga no se rinde
Camavinga tiene contrato hasta 2029 y no piensa moverse. Quiere triunfar en el Real Madrid y está decidido a dejar atrás las lesiones que han frenado su crecimiento. Tiene hambre y quiere demostrar por qué llegó como una promesa mundial.
Ahora que su recuperación va mejor de lo esperado, el Mundial de Clubes puede ser su plataforma de relanzamiento. Ceballos lo sabe. Su principal rival está de vuelta y más fuerte que nunca.