California acaba de poner en marcha una ley que puede sorprender a muchos conductores: el uso del teléfono móvil mientras conduces está completamente prohibido. Y cuando decimos “uso”, hablamos de cualquier interacción con el móvil que implique sostenerlo en la mano, ya sea para enviar un mensaje, hacer una llamada o incluso consultar el GPS.
Esta norma no es solo una recomendación, sino una ley estricta que busca reducir los accidentes causados por distracciones. De hecho, las autoridades están autorizadas a imponer multas automáticas sin necesidad de advertencias, simplemente por verte con el teléfono en la mano.
¿Qué está permitido y qué no?
La ley de California es muy clara: solo se permite usar el móvil si está montado en el vehículo y se puede manejar sin tocarlo. Esto significa que cualquier interacción manual con el teléfono, incluso para actividades tan comunes como cambiar una canción o consultar un mapa, está prohibida.
Este cambio llega porque muchos conductores antes creían que usar el móvil para navegar no contaba como distracción si no lo sostenían, pero ahora eso cambió. Solo los sistemas manos libres, que no requieran que levantes las manos del volante, están permitidos.
Multas automáticas para aumentar la seguridad
Lo más novedoso de esta legislación es que las multas se imponen automáticamente si un agente detecta que sostienes el teléfono mientras conduces. No importa si estás enviando mensajes, hablando o simplemente mirando la pantalla; si lo tienes en la mano, te pueden sancionar.
Este enfoque busca frenar la tentación de usar el móvil y crear un fuerte efecto disuasorio. La conducción distraída es una de las principales causas de accidentes, y esta ley pone en claro que la seguridad debe ser prioridad absoluta.
¿Qué significa esto para el resto de Estados Unidos?
California está marcando un camino que muchos otros estados podrían seguir. El problema de la conducción distraída con el móvil no es exclusivo de este estado, y hay un movimiento creciente para implementar leyes similares en todo el país.
El objetivo es simple: que los conductores entiendan que el móvil debe ser un accesorio de apoyo, no una fuente de peligro. Si necesitas usarlo, lo mejor es detenerse o emplear sistemas manos libres completamente seguros.
En definitiva, esta ley recuerda que la atención al volante no admite distracciones. Usar el móvil en la mano mientras conduces no solo te pone en riesgo a ti y a otros, sino que ahora también puede costarte una multa sin previo aviso. Por eso, más vale ser precavido y respetar estas nuevas normas que buscan salvar vidas.