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Mujer tapándose la nariz frente a una lavadora con ropa de colores.

Descubre las 7 señales de alarma de una lavadora sucia y cómo limpiarla a fondo

Evita el moho y el mal olor en tu ropa con estos trucos sencillos para mantener tu lavadora impecable

Aunque acabes de comprar una lavadora nueva, adoptar una rutina de mantenimiento puede evitar problemas futuros. Realiza un lavado de mantenimiento una vez al mes para eliminar bacterias, usando un ciclo de lavado a 60 °C o más. Utiliza un limpiador específico para lavadoras cada 3-6 meses para una limpieza profunda, y no olvides limpiar el cajón del detergente y el filtro al mismo tiempo.

Consejos para limpiar el filtro de la lavadora

El filtro de la lavadora, ubicado generalmente en la parte delantera, debajo del tambor, puede acumular pelusas y residuos, generando malos olores y obstrucciones. Para evitar esto, es fundamental limpiar el filtro regularmente. Desenrosca el filtro cuidadosamente, vacía el agua y limpia los residuos con un cepillo de dientes antes de volver a colocarlo. Esta práctica no solo previene malos olores, sino que también mejora el rendimiento de tu lavadora.

Una mano sosteniendo billetes de euro frente a un técnico reparando una lavadora.
Esta práctica no solo previene malos olores, sino que también mejora el rendimiento de tu lavadora | Getty Images

Qué hacer cuando la ropa huele a humedad o tiene moho

Una señal clara de que tu lavadora necesita una limpieza es el olor a humedad en la ropa, incluso después del lavado. Esto indica la presencia de moho en la lavadora. Deja la puerta y el cajón del detergente abiertos entre ciclos para permitir que se sequen y aireen. Para eliminar el moho, realiza una limpieza profunda y asegúrate de mantener el tambor y las juntas limpios.

Cuidar la lavadora para que no acumule cal

La acumulación de cal es un problema común, especialmente en áreas con agua dura. Esta situación puede dañar el electrodoméstico a largo plazo, afectando la resistencia y dejando la ropa áspera. Utiliza un limpiador especializado para eliminar la cal regularmente y mantener tu lavadora en buen estado.

Quitar el polvo del panel de control de la lavadora

No olvides limpiar el exterior de la lavadora, donde también se acumula suciedad. Usa un paño de microfibra húmedo para limpiar los mandos y el tambor exterior, y un cepillo de dientes para las ranuras alrededor de los botones. Esta práctica sencilla mantendrá tu lavadora limpia y funcionando correctamente.

Vigilar el moho en la goma del tambor de la lavadora

El moho en la goma del tambor es una señal evidente de suciedad. Para evitar su aparición, limpia la junta con un paño humedecido en lejía diluida en agua cada pocos lavados. Asegúrate de que la junta esté bien seca antes del siguiente lavado para evitar que la lejía se transfiera a la ropa. Esta práctica regular ayuda a prevenir el crecimiento bacteriano y mantiene tu lavadora en óptimas condiciones.

Cómo limpiar el cajetín de la lavadora

El cajón del detergente puede obstruirse con restos de jabón y suavizantes, creando un ambiente ideal para el moho. Para limpiarlo, retira el cajón y lávalo con agua tibia y jabón, utilizando un cepillo de dientes viejo para las grietas. Déjalo secar completamente antes de volver a colocarlo. Limpiar el cajón entre ciclos de lavado también es una buena práctica para mantenerlo en buen estado.

Mantener tu lavadora limpia no solo prolonga su vida útil, sino que también asegura que tu ropa salga fresca y sin olores desagradables. Adoptar estas sencillas prácticas de limpieza y mantenimiento puede marcar una gran diferencia en el rendimiento de tu electrodoméstico y en la calidad de tus coladas. No subestimes la importancia de una lavadora limpia y eficiente. ¡Empieza hoy mismo a cuidarla como se merece!