La Liga ya ha comenzado y el Barça suma dos victorias importantes. La primera fue clara frente al Mallorca, donde apenas sufrió. La segunda, anoche contra el Levante, tuvo más dificultades y dejó un poso de debate que todavía continúa.
El Levante, recién ascendido y con mucha ilusión, se planto frente al Barça con un plan valiente y ordenado. Sorprendió a todos al marcharse al descanso con dos goles de ventaja. El Barça reaccionó tras la pausa, pero la remontada no fue lo único de lo que se habló.
Balde y la polémica mano ante el Levante
En las últimas temporadas, el arbitraje en España ha sido tema constante de conversación. El VAR, lejos de resolver dudas, las ha multiplicado en cada jornada. La herramienta tecnológica parece útil, pero su aplicación genera demasiada incertidumbre.

En este partido, toda la polémica giró alrededor de una jugada muy concreta. Aleandro Balde interceptó el balón con la mano dentro del área. La acción fue revisada por el árbitro en el monitor, encendiendo la tensión tanto en la grada como en las redes sociales.
El precedente que pone todo en duda
Muchos aficionados recordaron de inmediato un episodio muy reciente y cargado de simbolismo. El último precedente casi idéntico se dio en un Clásico, con Mateu Lahoz como colegiado principal. En aquella ocasión, el protagonista fue Aurélien Tchouaméni en una jugada muy similar.
Lahoz fue a ver la acción repetida en el monitor, igual que en este caso. Sin embargo, decidió que no había penalti y dejó seguir el partido. Ahora, con Balde, la interpretación fue opuesta, generando indignación y alimentando la sensación de incoherencia.
Un criterio que no termina de convencer
La disparidad en las decisiones desconcierta a todos los seguidores del fútbol español. No se entiende por qué dos acciones casi idénticas reciben resoluciones tan diferentes. La percepción general es que no existe una línea clara en los criterios arbitrales.

El VAR se creó para dar justicia, uniformidad y tranquilidad. No obstante, su aplicación en España sigue siendo irregular y muy cuestionada. Ejemplos como el vivido con Balde ante el Levante refuerzan esa desconfianza creciente entre los aficionados.
El Barça y el reto de la Liga
Más allá de la controversia arbitral, el Barça es consciente de que cada partido en esta temporada será exigente. La presión es máxima desde la primera jornada. Rivales como el Levante, recién llegados a la élite, encuentran en estos escenarios una motivación extra para crecerse.
La polémica de las manos ha sido protagonista en la conversación posterior al encuentro. El Barça logró sumar los tres puntos, pero el debate sigue centrado en las decisiones arbitrales. Aleandro Balde, sin pretenderlo, se convirtió en el centro de una tormenta mediática.