Era cuestión de tiempo. Desde que se hizo oficial que Lamine Yamal lucirá el dorsal número 10 del FC Barcelona, todos estaban esperando una reacción.
Una reacción concreta. La del hombre que convirtió ese número en leyenda.
Y no ha tardado. Y ha sido en forma de mensaje personal. Cercano, emotivo, lleno de peso simbólico.
Porque cuando habla Leo Messi, no lo hace cualquiera. Y Lamine Yamal, recién cumplida la mayoría de edad, ha recibido el reconocimiento más especial, el más importante de todos.

Messi sigue muy pendiente de Lamine
No es la primera vez que el astro argentino se deshace en elogios hacia el joven canterano del Barça. Ya lo felicitó cuando ganó el Golden Boy.
También cuando levantó su primera Liga con el primer equipo. Messi observa en silencio, pero no está ausente.
Y esta vez no ha querido quedarse callado. Sabe lo que significa vestir el 10 del Barça.
Y sabe lo que representa que lo lleve alguien como Lamine. Por eso, sus palabras no han sido elegidas al azar.
“Ese dorsal es lo que tú mereces”, le ha dicho Messi al joven talento azulgrana.
El heredero que nunca tuvo
Desde su salida en 2021, el número 10 del Barça había quedado huérfano. Ni Agüero, ni Ansu Fati, ni nadie logró llenar ese vacío.
Era como si la camiseta esperara al elegido. Y ese elegido, para Messi, ya tiene nombre.
"Lamine Yamal es el presente y el futuro", ha dicho en más de una ocasión. No es solo una frase bonita. Es una declaración de intenciones, una especie de bendición, un traspaso simbólico de poderes.
Como si Leo entregara personalmente su corona al joven príncipe.

Orgullo y responsabilidad en el Camp Nou
En el club han recibido con entusiasmo el mensaje de Messi. Porque no es solo un respaldo a Lamine. Es un respaldo al proyecto, a la cantera, a la filosofía que hizo grande al Barça.
Lamine, por su parte, ha acusado el golpe de emoción. Sabe lo que significa. Y también sabe que ese mensaje lo obliga aún más.
Porque heredar el 10 de Messi no es un privilegio gratuito. Es un reto diario. Una exigencia constante que él está dispuesto a asumir.
El Barça ya tiene nuevo líder
No es una exageración. A sus 18 años recién cumplidos, Lamine ya es el gran referente del equipo. Por talento, por personalidad y por ese aura que lo envuelve.
Ahora, además, lleva el número más sagrado del club. Y lo hace con el aval de quien lo convirtió en eterno.
Messi ya ha hablado. Y lo ha hecho para dejar claro que Lamine Yamal es más que una promesa. Es el elegido.