El Clásico entre Barcelona y Real Madrid dejó muchas imágenes para el recuerdo, pero una de las más simbólicas ocurrió antes de que el balón echara a rodar. Hansi Flick y Carlo Ancelotti protagonizaron un breve pero revelador intercambio a pie de campo. Pocas palabras, mucha admiración y una pizca de ironía.
El técnico alemán admira profundamente al italiano, se acercó a Ancelotti para dedicarle unas sinceras palabras:
Lo que le dijo Flick a Ancelotti al oído
“Te admiro desde tu primera etapa en el Real Madrid y también en el Bayern. Espero que hoy pierdas, pero te deseo lo mejor. En el Real Madrid o donde sea”, le dijo.
Flick, que no oculta su respeto por el veterano entrenador merengue, considera que Ancelotti y Guardiola han sido los dos técnicos más influyentes en el fútbol alemán del siglo XXI.
Ancelotti, con la elegancia que le caracteriza, no se quedó callado y respondió con una sonrisa irónica:
“Te vas a quedar con las ganas de verme perder”. Al final fue el barcelonista el que se salió con la suya. Pero la buena sintonía entre ambos no se perdió en ningún momento.
El gesto, aunque breve, resume a la perfección la relación entre dos entrenadores con trayectorias muy diferentes pero conectadas por una visión compartida del juego. El respeto mutuo entre Flick y Ancelotti fue evidente, incluso en un duelo tan caliente como el Clásico.
Ancelotti es un referente para Flick
Desde el entorno del Barça destacan que Flick tiene como modelo de gestión el estilo tranquilo y resolutivo de Ancelotti, aunque con matices propios. No es casualidad que lo considere un referente desde que lo vio triunfar en el Real Madrid y en Múnich.
Aunque esta vez las palabras fueron amables, ambos sabían que lo que estaba en juego era mucho más que tres puntos. Flick ha llegado para devolver al Barça la gloria, mientras que Ancelotti está en el centro del huracán tras una temporada decepcionante con el Madrid.
En el fútbol de élite, incluso un simple susurro antes de empezar el partido puede decir más que 90 minutos de declaraciones. Flick no ignoraba que si el Real Madrid no salía ganador de Montjuïc, Ancelotti debería hacer las maletas.