El FC Barcelona se llevó una victoria memorable ante el Atlético de Madrid (2-4) en el Estadio Metropolitano en LaLiga EA Sports 2024-25. Los azulgranas protagonizaron una remontada épica, donde dos jugadores brillaron de manera especial: Lamine Yamal y Ferran Torres.
Este último, a pesar de no ser el más destacado en la prensa, demostró una vez más su capacidad para marcar goles cruciales en momentos decisivos. Sin embargo, la gran sorpresa fue su reacción después del partido, cuando expresó su deseo de emular a Lamine Yamal.
El resurgir del Barça en el Metropolitano
El Atlético de Madrid parecía tener controlado el partido cuando se adelantó 2-0 en el minuto 70. Con el Barcelona necesitando reaccionar, Lamine Yamal apareció en su mejor versión. El juvenil, uno de los talentos más prometedores, anotó un golazo en el minuto 90+2 que dio al Barça la ventaja y dejó al público atónito.
Poco después, Ferran Torres aumentó la ventaja con otro gol. El delantero de Mataró, que había tenido algunas ocasiones previas, aprovechó un pase de Pedri González y un recorte brillante para deshacerse de la marca de Connor Gallagher.
Su disparo, un zurdazo potente, acabó en el fondo de la red después de un leve desvío en Reinildo, dejando sin opciones a Jan Oblak. Era el gol de la sentencia.
El duelo interno entre Lamine Yamal y Ferran Torres
A pesar de la actuación deslumbrante de Lamine Yamal, Ferran Torres también fue una pieza clave para el triunfo del Barça. Durante el partido, estuvo presente, pero su impacto fue decisivo al final. Muchos lo vieron como el héroe silencioso del encuentro, aunque al final Yamal se llevó el título de MVP.
Ferran Torres ya ha demostrado a lo largo de su carrera en el Barça que tiene una capacidad especial para aparecer en momentos clave. Ya sea con su agilidad en los desmarques, su excelente manejo del balón, o su capacidad para disparar desde fuera del área, siempre es un jugador a tener en cuenta.
Además, Torres tuvo una ocasión clarísima al principio del partido, cuando remató al palo después de un buen pase de Dani Olmo. A pesar de fallar en esa ocasión, el atacante no se desanimó y continuó buscando su oportunidad. Su gol, al final del encuentro, no solo selló la victoria, sino que también subrayó su capacidad para capitalizar en momentos de presión.