Europa se rinde a sus pies tras su irrupción con la selección española Sub-17, su título de la Youth League y su meteórica ascensión en el Barça Atlètic. Pero en los despachos del Bernabéu hay quien se lleva las manos a la cabeza al recordar lo que ocurrió hace tres años en Galicia.
En silencio, el Real Madrid preparó el terreno, localizó a la familia y lanzó una ofensiva directa. Pero todo fue en vano.
La historia de Dro Fernández no es la típica. No responde al perfil de fichaje mediático ni a una estrategia comercial. Lo suyo ha sido un crecimiento natural, sin prisas, pero con pasos firmes.
Desde muy pequeño ya apuntaba maneras. Nacido en Burela (Lugo), se formó en la cantera del Deportivo y del Racing Villalbés. Y ahí fue donde el Barça detectó algo diferente.
La elección que cambió su carrera
Con solo 14 años, tanto Real Madrid como Barça se lanzaron a por él. La familia de Dro recibió una propuesta clara desde Valdebebas: formación, residencia y una hoja de ruta bien definida.
Pero el joven gallego lo tuvo claro. Quería vestir de azulgrana. Quería crecer en La Masia.
Según fuentes cercanas a la familia, la leyenda de la cantera del Barça fue decisiva. Pero también pesó mucho el proyecto humano y educativo que ofrecía el club.
Para sus padres, el prestigio de La Masia como escuela de deportistas y personas fue clave. En Valdebebas, en cambio, vieron un entorno más frío, donde la cantera apenas tiene representación en el primer equipo.
A la hora de apostar, Dro no dudó. Y no se equivocó.
El favorito de Hansi Flick
El tiempo ha dado la razón al joven gallego. Su progresión en el fútbol base del Barça ha sido constante.
Este verano, tras brillar con la selección, Hansi Flick pidió expresamente que hiciera la pretemporada con el primer equipo. No solo cumplió: deslumbró en su debut ante el Visel Kobe.
Dro es un centrocampista total. Tiene calidad, recorrido, visión de juego y una personalidad impropia para su edad.
Técnicamente es exquisito y tácticamente inteligente. Además, su madurez fuera del campo le ha granjeado el respeto del vestuario.
En los pasillos de la Ciutat Esportiva ya se habla de él como uno de los grandes proyectos del club. Y aunque no tiene aún ficha con el primer equipo, no sería extraño verle en partidos oficiales esta temporada.
El futuro es suyo
Florentino Pérez lo intentó. Se adelantó incluso al Barça, pero no consiguió convencerle. Hoy, el Real Madrid se lamenta de lo que pudo ser y no fue.
Mientras tanto, el Barça sonríe. Porque ha ganado un jugador que representa lo mejor de su esencia.
Dro Fernández es talento, formación y compromiso. Y, sobre todo, una promesa que ha sabido decir que no al Madrid para decir que sí a su sueño.
El tiempo dirá hasta dónde llegará.