Joshua Kimmich ha sido durante mucho tiempo el principal candidato para llenar el vacío que dejó Sergio Busquets en el Barça. Desde que el icónico mediocentro se marchó, tanto Xavi Hernández como el nuevo técnico, Hansi Flick, han señalado al internacional alemán como la pieza ideal para anclar la medular del Barça. Kimmich, con su inteligencia táctica, visión de juego y capacidad para organizar el juego desde atrás, parecía la opción perfecta para continuar el legado que dejó marcado a fuego Busquets.
Sin embargo, en los últimos días han surgido informaciones desde Alemania que indican que Joshua Kimmich está cerca de renovar con el Bayern de Múnich. Esta decisión complicaría su posible traspaso al Barça, ya que el coste de su fichaje aumentaría hasta los 60 millones, cifra que Joan Laporta y Deco no están dispuestos a pagar. Con esta situación en mente, la directiva ha decidido cambiar de estrategia y centrar sus esfuerzos en un pivote joven, con gran proyección y que puede ser una solución más duradera.
Joshua Kimmich cambia de opinión y trastoca los planes del Barça
Hace ya algunas semanas, el futuro de Joshua Kimmich parecía estar decidido: su intención era no renovar y probar suerte lejos del Bayern en 2025. Ahora bien, en los últimos días la situación ha dado un giro de 180 grados y el pivote alemán está dispuesto a negociar su continuidad. Las palabras del director deportivo de los alemanes, Max Eberl, parecen haber calado hondo en Kimmich.
Sí, porque después de que Max Eberl reconociera que “Kimmich debe ser una de las referencias del club en el futuro” todo ha cambiado. El '6' aseguró que "siempre es agradable escuchar el respaldo y el apoyo del club" y frustró los sueños del Barça al confesar que "sí, estoy abierto a negociar la renovación".
Nuevo objetivo para Joan Laporta y Deco
Joan Laporta y Deco han mantenido una reunión para descartar definitivamente la opción de Kimmich y centrarse en otro pivote que ya estaba en la órbita del club: Martín Zubimendi. El centrocampista de la Real Sociedad es uno de los más talentos prometedores del mundo gracias a su capacidad para leer el juego, interceptar balones y construir desde el pivote. A sus 24 años, Zubimendi representa la combinación perfecta de juventud y experiencia, lo que le convierte en una opción muy atractiva para el Barça.
Además de su calidad técnica, Zubimendi destaca por su excelente posicionamiento táctico y su capacidad para mantener la calma bajo presión, cualidades esenciales para el estilo de juego del Barça. Flick sigue de cerca su evolución y, aunque su fichaje también podría costar 60 millones, la directiva lo considera una inversión a largo plazo y está dispuesta a realizar un esfuerzo.
Con Joshua Kimmich cada vez más lejos, el Barça ha puesto sus ojos definitivamente en Zubimendi. Si todo sigue según lo planeado, el joven de la Real Sociedad podría ser el encargado de liderar el centro del campo en los próximos años. Y también pondría fin a la incesante búsqueda del heredero de Sergio Busquets.