El Barça atraviesa uno de sus mejores momentos en años. La victoria en el Clásico del pasado domingo ha sido clave. Si mañana salen victoriosos ante el RCD Espanyol, serán campeones de Liga.
Pocos imaginaban un final tan positivo hace apenas unos meses. Pero Joan Laporta decidió mover ficha y lo hizo a tiempo. Su apuesta ha transformado por completo la temporada.
Joan Laporta apostó por Hansi Flick y el cambio ha funcionado desde el primer día
La destitución de Xavi Hernández generó dudas en su momento. Hansi Flick aterrizó como una solución de emergencia. Sin embargo, no tardó en cambiar el ambiente.
A pesar de las limitaciones en la plantilla, los resultados comenzaron a llegar. El vestuario se unió en torno al nuevo cuerpo técnico. Y poco a poco, el optimismo regresó al Camp Nou.
Joan Laporta ha estado siguiendo de cerca el proceso y tiene gran parte de culpa en el éxito del equipo. Eso sí, no ha tardado en reconocer el verdadero mérito de quien ha logrado este milagro deportivo: Hansi Flick.
Joan Laporta cierra la renovación del mejor fichaje para el Barça
Hansi Flick no solo ha logrado buenos resultados, también ha mejorado la imagen del equipo. El pase a semifinales de Champions ha sido un logro mayúsculo. Y también una fuente de ingresos vital.
Joan Laporta, consciente de ello, ha querido premiar al técnico con un gesto claro. Ha cerrado su renovación para garantizar continuidad y estabilidad.
Flick seguirá en el banquillo del Barça, como mínimo, hasta 2027
El entrenador firmó hasta 2026 cuando llegó, pero ahora ha dado luz verde a una ampliación por un año más. Hansi Flick se ha mostrado encantado con la propuesta de Joan Laporta y seguirá en el Barça hasta 2027.
Siente que puede seguir creciendo al frente del proyecto. Su conexión con los jóvenes y su enfoque metódico han sido claves. Y el vestuario lo respalda sin fisuras.
Joan Laporta llevaba tiempo negociando este acuerdo en silencio. Sabía que asegurar la continuidad de Flick era una prioridad. Y lo ha conseguido.
El Barça apuesta por la estabilidad
Tener un líder fuerte y respetado en el banquillo es clave. Más aún tras años de cambios y dudas. Flick aporta una base sólida sobre la que construir.
Esta renovación también envía un mensaje claro al resto del grupo. Hay confianza en el proyecto. Y se quiere avanzar paso a paso, sin prisas, pero con ambición.
Con Flick al mando hasta 2027, el Barça puede mirar al futuro con ilusión. Joan Laporta ha conseguido algo que parecía imposible hace unos meses: recuperar la sonrisa culé.