La desesperación y la tristeza del centrocampista del Barça se palpó también entre sus compañeros y el seleccionador
Sin lugar a dudas, Gavi vivió ayer el peor partido de su carrera. El joven centrocampista azulgrana, que tuvo que abandonar el terreno de juego lesionado en el minuto 24, acabó en el vestuario completamente destrozado y abatido.
Pese a que solo tiene 19 años, el canterano culé solo había tenido una pequeña lesión. De hecho, solo le hizo perderse dos partidos. No obstante, si los malos presagios ahora se confirman, Gavi podría decir adiós a la temporada 2023-2024.
Como decimos, tras lesionarse con España ante Georgia, no había consuelo para Gavi. El jugador andaluz era consciente de que se había lesionado de gravedad y, por mucho que sus compañeros fueron a consolarle, el futbolista del Barça no se lo podía creer.
"No puede ser, no puede ser, ¿por qué a mí?", repetía entre lágrimas. Además, los gritos de lamento de Gavi se escuchaban más allá del vestuario local del Nuevo José Zorrilla.
De esta manera, la desesperación y la tristeza del '6' azulgrana se contagió de inmediato entre sus compañeros, que no lograban articular palabra. Solo los veteranos, como Iñigo Martínez, intentaron animar al combinado español.
De hecho, el propio Luis de la Fuente, aseguró tras el choque que había sido "la victoria más amarga" de su carrera. "Estamos destrozados, en el vestuario parecía que habíamos perdido", remarcó el seleccionador.
El centrocampista azulgrana, ya con muletas desde que abandonó el estadio, voló directamente desde Valladolid a Barcelona para someterse a unas pruebas médicas que indicarán el alcance de su lesión.