Ancelotti se fue antes de abordar el tema del arbitraje y en Madrid ya hablan de rajadas y de descontento con los árbitros... después de la designación de Gil Manzano para el clásico.
Carlo Ancelotti se fue por piernas de la reunión anual del Comité de Entrenadores que se ha celebrado en la sede de la Federación Española de Fútbol en Las Rozas. Ancelotti se fue corriendo porque "tengo entrenamiento". Y lo tiene, pero su fuga da pie a especulaciones.
Era cierto. El Real Madrid tenía programado un entrenamiento para las 16:30 de esta tarde, pero con media plantilla repartida entre sus selecciones y con el próximo compromiso a diez días vista. No parece motivo suficiente para que Ancelotti abandone una reunión clave para los entrenadores.
Algo debió pasar adentro, en donde se sabe que el técnico madridista compartió amigablemente con Diego Simeone, con quien se lleva muy bien a pesar de la rivalidad de sus clubes.
A la salida, y al ser preguntado por los periodistas acerca de si había ido bien la reunión, Ancelotti respondió con un "No, ha sido un lío". E invitado a ampliar su respuesta, añadió: "no entienden a los entrenadores". En este sentido, hay que precisar que en la reunión se trató el tema de los despidos de entrenadores y la necesidad de que perciban de inmediato sus contratos, llegándose a proponer que los clubes que no paguen no puedan tomar parte en la competición.
Otras fuentes indican que se fue molesto por el tema arbitral, aunque conviene poner en cuarentena esta afirmación porque cuando Ancelotti se fue de la reunión aún no se había abordado el tema arbitral. Pero al madridismo sociológico, sector mediático, ya le conviene hacer ruido y presentar al entrenador del Madrid indignado con los árbitros y con el caso Negreira.
Son más las ganas y el deseo que la realidad. El tema arbitral no había empezado a debatirse cuando Ancelotti se fue. Probablemente ya no le interesa, especialmente desde que sabe que, siempre que lo necesite, tendrá a Gil Manzano listo para arbitrar al Real Madrid.
Ancelotti se fue porque tenía entrenamiento. Eso ya lo sabía cuando acudió a la reunión. Y el Real Madrid debe preguntarse dónde hacía más falta su entrenador, si en la cumbre de entrenadores o dirigiendo un entrenamiento sin los titulares trabajando y a diez días vista del próximo partido.
Lo importante es que quede claro que el entrenador del Real Madrid se fue enfadado. ¿Están desquiciados por un Girona que no juega en Europa? ¿O quizá porque no se despegan del Barça? Pero, eso sí, muy enfadados. Y que quede constancia entre sus medios.