El Barça aparca el juego bonito para ponerse el mono de trabajo y demostrar una actitud que le convierte en equipo Champions y deja atrás la pesadilla de la Europa League.
El Barça sale de Oporto con tres puntos más en el zurrón, que son ya seis en dos jornadas y que le consolidan en el liderato de su grupo, algo que no se vio nunca en los dos últimos años. El Barça no ha jugado bonito, se ha visto incluso desbordado por el Oporto en diversas fases del partido, pero ha sabido ganar y sumar los tres puntos.
El partido ha sido muy loco. Lesión de Lewandowski en la primera mitad, lesión de Araujo, expulsión de Gavi, desaparición de Lamine Yamal... El VAR ha actuado, el Barça ha salvado un penalti en contra que ni el VAR tenía claro y el VAR ha anulado un tanto de chilena de Taremi.
El Barça ha resuelto el partido en la primera mitad y sus hombres han luchado como jabatos hasta el final para defender su gol. Han acabado con nueve hombres y medio por la expulsión de Gavi y la lesión de Araujo, que ha aguantado los últimos minutos sobre el césped aunque apenas podía colaborar con sus compañeros. El Barça ha renunciado a las exquisiteces. Había que ganar en Oporto y lo han logrado. Esta victoria es más que una victoria, es romper definitivamente con el pasado negro reciente. Es regresar a la grandeza que siempre caracterizó al Barça luchando con los grandes en las eliminatorias.
Y han colaborado todos. Desde Ter Stegen, un clásico, hasta Lamine Yamal, que generó el poco peligro que creó el Barça y acabó desaparecido supuestamente por un apretón inoportuno. Koundé y Araujo salvando goles de forma providencial. Balde y Cancelo luchando todos los balones. Como Oriol Romeu, Güdogan y Gavi en el centro. Delante Lewandowski dejó su plaza a la media hora a Ferran Torres y por ahí llegó el gol. También Joao Felix brilló a gran nivel en un partido difícil para él, considera un traidor en Oporto por largarse a reforzar las filas del eterno rival Benfica.
El Barça empezó el partido sin tensión y el Oporto aprovechó los errores en el pase de los hombres de Xavi para generarles problemas. El Barça ha jugado demasiado en largo y le ha faltado precisión para llegar a sus puntas con el balón controlado.
Y Galeno le ha creado más problemas de los previstos a la zaga blaugrana. El Barça no encontraba respuesta, llegaba tarde al balón, con poca intensidad y una marcha menos. Pero también es cierto que los de Xavi han ido de menos a más. Pero una entrada fuera de lugar rompió a Lewandowski, que tuvo que ser sustituido por Ferran Torres en el minuto 33.
Y ha sido Ferran Torres quien ha inaugurado el marcador en el minuto 45+2 aprovechando un error de Romario que ha permitido a Gündogan servirle un pase preciso que el delantero valenciano ha convertido en gol batiendo por bajo al portero luso Diogo Costa.
El Oporto generó ocasiones a través de Taremi, Galeno y Pepé aprovechando su agresividad en el centro del campo que no obtuvo respuesta en los centrocampistas barcelonistas, que echaron en falta a Frenkie De Jong para poner orden. El Barça se fue al decanso con ventaja en el marcador gracias a su pegada y a las oportunidades desperdiciadas por el Oporto.
En la segunda mitad el Barça ha tenido minutos de inspiracón, pero ha ido de más a menos y ha antepuesto la entrega a la garra a la exhibición técnica. Hoy tocaba ponerse el mono de trabajo y estos jugadores han demostrado que cuando se trata de trabajar más que el rival también saben hacerlo.
El Oporto se fue adueñando de la situación y Ter Stegen tuvo que prodigarse hasta en tres paradones de mérito. Los portugueses llegaban pero no sabían resolver en el último toque, en donde aparecían providencialmente Araujo, Cancelo y Koundé.
Y en el minuto 76 se produjo la jugada polémica del partido, cuando Eustaquio entró en el área llevándose un balón con el antebrazo que acabaría recibiendo un manotazo de Cancelo dentro del área. Inicialmente el árbitro Taylor señaló penalti, pero el VAR le convenció de que antes de que se produjera la mano de Cancelo, Eustaquio se había llevado el balón con el antebrazo de forma antireglamentaria.
Los últimos minutos del partido los dedicó el Barça a ejercer el fútbol control. Y, pillando a todos por sorpresa, como siempre, Lamine Yamal abandonó el terreno de juego. Supuestamente por un apretón. La cuestión es que no volvía y Xavi decidió sustituirle por Marcos Alonso. Y fue en ese momento, con inferioridad numérica blaugrana, cuando el Oporto marcó un golazo a través de una chilena de Taremi. El VAR detectó, afortunadamente, el fuera de juego del jugador portuguyés.
El Barça fue a menos y el Oporto a más. Y el partido se le hizo largo a los de Xavi. Tanto que no fueron capaces de tener la posesión del balón y las imprecisiones en el centro del campo permitieron los contrataques portugueses. El Oporto llegaba y el Barça no. La épica fue a más con la expulsión de Gavi a cuatro minutos del final dejando al equipo con 9,5, porque Araujo solo servía para ejercer de defensa escoba.
El Barça ha aprendido la lección. El pasado año jugó mejor que el Inter los dos partidos de la liguilla, pero pasó el Inter y el Barça no. Ahora se trataba de romper con la historia reciente y lo han conseguido. Aquello de que "el Barça es equipo de Euripa League" ya solo es un recuerdo. Ahora es un equipazo de Champions League de pleno derecho. Jugando como hoy el Inter llegó a la final de la Champions la temporada pasada. El Oporto es el candidato a uno de los dos puestos que clasifican para octavos de final. Y de momento ya le han ganado en casa.
FC Porto: Diogo Costa; Joao Mario (Nico, min.85), Cardoso, Carmona, Wendell; Varela (Conceicao, min.85), Eustaquio, Galeno (Iván Jaime, min.85), Romario (Evanilson, min.64), Pepe y Taremi (Namaso, min.85).
FC Barcelona: Ter Stegen; Cancelo, Koundé, Araujo, Balde; Romeu (Sergi Roberto, min.69), Gündogan, Gavi; Lamine (Marcos Alonso, min.80), Lewandowski (Ferran, min.34) y Joao Félix (Fermín, min.69).
GOL: 0 - 1, min.45+2, Ferran.
Árbitro: Anthony Taylor (ING). Amonestó a Cardoso (min.28) por parte del Oporto. Y a Cancelo (min.13), Araujo (min.28), Gavi (min.37), Koundé (min.47), Félix (min.51) y Sergi Roberto (min.86) en el Barça. Expulsó a Gavi por segunda amarilla (min.93).
Campo: Estádio do Dragão.