España ha elegido nuevas capitanas en su era post-Vilda, siendo las cuatro seleccionadas por el vestuario jugadoras del Barça.
El FC Barcelona es nuevamente importante en la toma de decisión de la selección española femenina. Desde que Jorge Vilda decidiera arrebatarles la capitanía, hasta el momento las encargadas de lucir el brazalete habían sido Ivana Andrés (R. Madrid), Esther González (ex-R. Madrid) e Irene Guerrero (ex-At. Madrid), perdiendo las futbolistas del cuadro catalán esta oportunidad.
Tanto Alexia Putellas como Irene Paredes fueron las grandes damnificadas por haberle plantado cara claramente al exseleccionador, ahora que ahora ha cambiado. Porque con la llegada de Montse Tomé al banquillo de España, la nueva seleccionadora ha dado la oportunidad al vestuario de seleccionar a sus capitanas.
Según informa 'Sport', el vestuario al completo ha tomado la decisión de volver a designar como capitanas principales a Alexia Putellas e Irene Paredes, las encargadas de dar la cara en estos momentos en su batalla contra la Federación.
En este sentido, el vestuario ha decidido completar el cuarteto de capitanas con dos futbolistas más del Barcelona: Mariona Caldentey y la futura Balón de Oro, Aitana Bonmatí, que se quedarán con los huecos que han ido dejando 'libres' Jenni Hermoso y Patri Guijarro.
Hablando en rueda de prensa y ejerciendo el rol de capitanas, tanto Alexia como Paredes fueron contundentes respecto a sus peticiones a la Federación, desmintiendo categóricamente que pidieran la cabeza de ningún entrenador.
"Nosotras veníamos reclamando que nos escucharan desde hace bastante tiempo, porque estábamos detectando que durante varias décadas ha existido una discriminación sistemática hacia el fútbol femenino. Ayer hizo un mes del Mundial que ganamos y sucedieron unos hechos inadmisibles, también con la Asamblea. Fue la gota que colmó el vaso. No queríamos seguir por ese camino", inició Alexia Putellas.
Finalmente, afirmó: "No ponemos ni quitamos a nadie, simplemente denunciamos y pedimos a la Federación que haya tolerancia cero, por Jenni, por nosotras y para no marcar precedentes, con cualquier persona que participe en un abuso. Nos han escuchado, están investigando y hay un proceso judicial abierto".
También hicieron la promesa de continuar hablando en España, ante el tiempo limitado que tenían en la rueda de prensa previa al partido de la Nations League contra Suecia.