La rebelión de las mujeres y las rebeliones de Florentino

La rebelión de las mujeres y las rebeliones de Florentino

| 2023-09-19

| Pedro Riaño

Los mismos medios que aplauden a Florentino Pérez cuando se salta las normas de la UEFA o de la Liga Profesional, acusan a las futbolistas españolas de pretender estar por encima de la ley con sus caprichos

"¿Qué más quieren ahora estas chicas caprichosas? Se han cargado al presidente y al seleccionador y presentan, además, una lista de cabezas que deben ser cortadas. Y chantajean a la Federación con negarse a su sagrado deber de representar a España". Este tipo de comentarios inundan las redes. Y muchos medios de comunicación han empezado a desmarcarse de las heroínas campeonas del mundo para ponerse del lado del orden establecido pidiendo orden.

Las mujeres no pueden saltarse la ley... ¿y los hombres?

El término "feminazi", relacionado con la elite del fútbol femenino español, se ha puesto de moda. Y las amenazan con durísimas sanciones y hasta de privarles de la posibilidad de jugar a fútbol porque quieren saltarse las normas. Y eso es intolerable.



En realidad lo que reclaman y exigen es acabar con el antiguo régimen en el fútbol español, quieren ser tratadas como Francia, Suecia, Inglaterra o Noruega tratan a las suyas. Como trata el Barça a sus chicas, que son mayoría aplastante en la selección, para que arrasen en España y en Europa. 

Pero no lo consiguen. Y lo que sí han logrado es que los medios y la opinión pública se les eche encima por rebeldes y golpistas. Las quieren obedientes y no les toleran ninguna reivindicación.



Van a por ellas y van a pagar por su afrenta a la selección española, a la que deben acudir como obligación y no por devoción. Porque lo suyo es una rebelión en toda regla, dicen. No se puede ir en contra de la ley, como años atrás no se podía cuestionar que las mujeres no tuvieran derecho a voto o ni siquiera pudieran conducir un vehículo. Lo decía la ley.

¿Qué pasa cuando el "rebelde" es Florentino Pérez?

La rebeldía de estas mujeres poco o nada tiene que ver con la rebeldía de otros. De Florentino Pérez, por ejemplo. Existen unas leyes y unas normas, pero si al presidente del Real Madrid no le gustan, se las salta y a otra cosa mariposa con la ovación cerrada de su guardia pretoriana mediática que está ahí para hacer sonar las palmas ante cualquiera de sus decisiones.





Florentino Pérez ha desafiado la ley del fútbol europeo intentando saltarse a la UEFA para inventarse una nueva competición, la Superliga. Y, después de anunciarlo en El Chiringuito, su salón privado de baño y masaje, se ha quedado solo. Y Europa ve a Florentino como un "golpista" que intenta tener más poder que la propia UEFA. Sus medios palmeros no consiguen más allá de los Pirineos el efecto que logran en España.

También ha entrado Florentino Pérez en conflicto con una serie de decisiones adoptadas democráticamente por todos los clubes españoles y que tienen que ver con los derechos televisivos. Florentino no deja que las plataformas que pagan una millonada para mantener a flote la industria del fútbol español entrevisten a sus jugadores. Y les echa de su campo en la previa, el descanso y los postpartidos. El Bernabéu es territorio hostil para las televisiones que sustentan el negocio, ganándose el cabreo generalizado del resto de clubes españoles.



Y no será porque entre los perjudicados no se encuentren madridistas de bufanda que besan por donde él pisa. Es el caso de Edu Aguirre, el que suelta odio y crispación en El Chiringuito siempre a favor del Real Madrid. Y está en Movistar para dar lecciones de fútbol... madridista.

Pero no pasa nada. Si el que conduce por la autopista en dirección contraria es Florentino Pérez, son los demás los que están equivocados. Las rebeliones de Florentino Pérez no solo son consentidas, sino que acaban siendo jaleadas por su aparato de propaganda mediático sin más misión que moldear la opinión de los españoles para que coincida con la del "Ser Superior".

Florentino sí puede saltarse las normas

Curiosa vara de medir de los medios que miran hacia otro lado cuando Florentino intenta saltarse la ley (la UEFA es corrupta y la Liga también, sostienen). Sin embargo, si quienes se atreven a plantar cara al poder establecido son mujeres, estamos ante un grupo de "feminazis" que quieren imponer sus caprichos a los demás.

Y esta reacción de los medios carga de argumentos a las futbolistas internacionales españolas. Queda mucho camino por recorrer. Empezando por los medios palmeros que son capaces de cambiar de opinión según sople el viento y según quién sea el infractor. Son los mismos que solo ven favores arbitrales para el Barça y perjuicios para el Real Madrid, porque para interpretar ya están ellos. Y tienen altavoces que resuenan hasta el último rincón de la piel de toro.

Puestos a hablar de rebeldes, hablemos de todos.