"Lo más triste es cuando no esperamos eso de un niño. Un niño llamando mono, no te imaginas cuánto duele esto", ha dicho Vinicius Tobías en las redes sociales.
El problema del racismo no para en España. Y ya hasta los niños se suman a él. El último episodio, ayer en Elda, durante el partido que disputaron el equipo local, el Eldense, y el Real Madrid Castilla luchando por el ascenso a Segunda A.
En un momento del partido un niño de apenas diez años, situado en la primera fila de la tribuna, obsequió al madridista Vinicius Tobías con gritos de "¡mono, mono!". Con tal mala fortuna que las cámaras registraron su comportamiento indeseable.
Esta vez no se le puede acusar a Vinicius Tobías de provocación previa, como sucede con Vinicius. Los insultos llegaron por ser jugador del Real Madrid y, además, de color.
El Real Madrid Castilla volvió a la capital con la tristeza de la derrota, pero también con la amargura de que el racismo no desaparece de los campos españoles. Está tan implantado que ya hasta los niños imitan a sus mayores insultando a los jugadores de color.
Las cámaras de televisión registraron el momento en que el niño, que lucía la camiseta del equipo local, le grito "¡mono, mono!" a Vinicius Tobías cuando se acerca al lugar en donde estaba ubicado.
Twitter se ha encargado de expandir la imagen que no es más que la de la vergüenza. Y Vinicius Tobías, la víctima del insulto, lamentó al término del partido la situación: "Lo más triste es cuando no esperamos eso de un niño. Un niño llamando mono", dijo el jugador del Castilla en sus redes sociales.
Vinicius Tobías, que seguirá un año más como cedido del Shakhtar Donetsk en el Castilla, añadió: "Es triste ver a los jugadores pasando por este tipo de prejuicios, no era la primera vez ni la segunda que esto está pasando a diario. No te imaginas cuanto duele, esto tiene que acabar ya, se pasaron de la raya. Los colores de piel no significan nada, todos somos iguales. Queremos respeto", exclamó.
"Vinícius Tobías también provoca."
¡Qué vergüenza!