Laporta insiste en rebajarle el salario y él responde que ya hizo suficiente sacrificio pasando de cobrar 12,5 millones de dólares, que percibía en la NBA, a 4 millones de euros para jugar en el Barcelona.
De la misma manera que a Joan Laporta no le tembló el pulso para despedir al rey del fútbol, tampoco le va a temblar ahora con Nikola Mirotic, el rey del baloncesto europeo que es feliz en Barcelona, quew tiene contrato en vigor, no quiere irse y le están forzando a marchar. Ya se han producido los primeros contactos con el Armani Milán.
Nikola Mirotic es el jugador franquicia del Barça. El pasado año fue el MVP de la Euroliga y este año ha mantenido su estatus de grande de Europa. Es también el jugador mejor pagado de la plantilla blaugrana. Hace cuatro años, el mundo del baloncesto se revolucionó porque el Barça consiguió su fichaje, un fichaje inesperado teniendo en cuenta que Mirotic estaba bien asentado en la NBA en Milkaukee después de pasar por Chicago y New Orleans.
Cuando el Barça contactó con él, Mirotic percibía 12,5 millones de dólares y tenía contrato en vigor. El Barça le pidió que hiciera un sacrificio económico y lo hizo. Aceptó cobrar la tercera parte de lo que ingresaba en Estados Unidos por disfrutar del privilegio de jugar en el Barça.
Mirotic llegó cobrando 4 millones de euros netos, una cifra que aumentaría en 500.000 euros a medida que avanzaran sus años de presencia en el Palau. Ahora está en los 5,5 millones netos que tiene firmados con el Barça. Y a Laporta le parece caro. Le ha pedido que se rebaje el salario para poder continuar. Y Mirotic le ha respondido que ya hizo un sacrificio importante pasando de 12 a 4 cuando firmó por el Barça y que luego ha aceptado bajarse otras dos veces el salario. Entiende que es una falta de respeto exigirle más recortres salariales olvidando lo que hizo en su momento.
Pero Laporta no se corta, está dispuesto a recortar la masa salarial, que sigue disparada después de las salidas de Neymar, Messi, Griezmann, Piqué, Busquets y Jordi Alba. Son cosas que no se entienden, pero es la realidad del Barça. Los gastos se disparan y el club no es capaz de generar nuevos ingresos. Y la solución pasa por empobrecer el equipo de fútbol y las secciones mientras en los despachos amigos y familiares del presidente amplían la nómina.
Laporta le echa en cara que el proyecto del club basado en su persona solo ha ganado una Liga (que con la de este año pueden ser dos) y dos Copas del Rey, con tres presencias en la Final Four y tres derrotas. El presidente le culpa a él por ser el más caro, como en su momento culpó a Messi por el podre endimiento del equipo de fútbol.
Y Mirotic se ha cansado. No está bien. Su situación afecta a su rendimiento y el equipo blaugrana lo acusa. Hoy se ha sabido por qué Mirotic no muestra en su rostro esa felicidad que dibujaba hasta ahora por jugar en el Barça. Laporta le está presionando para que se vaya y no le ha quedado más remedio que tomarle la palabra. Hay cola entre los grandes de Europa por hacerse con sus servicios y el mejor situado ahora mismo parece el Armani Milan.
El programa de radio Bar Caneletes ha informado que Mirotic ya ha aceptado dos veces rebajarse el sueldo y que no lo va a hacer más. La misma fuente asegura que está en conversaciones muy avanzadas para jugar la próxima temporada en el Armani Milan, en donde le recibirán con los brazos abiertos.
También el Mónaco, sobrado de dinero, está muy interesado en pujar por él. Mirotic tiene la oportunidad de aumentar sus ingresos fuera del Barça en lugar de recortarlos más si sigue. “Tengo contrato, me gustaría acabar en Barcelona, pero hemos visto a mucha gente, y me refiero también al fútbol, con contrato que no ha podido acabar. No lo sé, estoy con ganas de estar aquí, de intentar cumplir la promesa que hice cuando viene, de hacer algo importante, de hacer a la gente feliz. Me gustaría cumplir el contrato, pero aquí no es nada muy seguro”.
Es el Barça. Es el Barça de Laporta. Probablemente el problema es que a Mirotic no lo fichó él.