"¡No me lo puedo creer!" Iniesta deja a Gavi sin habla
Iniesta tenía deberes de su hija mayor en su partido contra el Barça y los cumplió satisfactoriamente.
Ocurrió al final del partido. Andrés Iniesta fue directamente a por Gavi. Tenía un encargo que debía de cumplir. Y Gavi se quedó anonadado.
Andrés Iniesta y su esposa, la catalana Anna Ortíz, han tenido cinco hijos, más otro que se quedó en el camino. Se trata de Valeria, Paolo Andrea, Siena, Romeo y Olimpia. Como no podía ser de otra manera, todos son fans de su padre y del Barça.
Y ha sido Valeria, la mayor, la que nació en Barcelona en abril de 2011, poco después de que su padre se conviertiera en leyenda en el Mundial de Sudáfrica en 2010, la que puso deberes a su padre aprovechando la visita del Barça. a Tokio
Como casi todas las niñas de su edad, Valeria tiene un ídolo futbolístico al margen de su padre. Se trata de Gavi. Y le pidió a su padre que le consiguiera la camiseta con la que Gavi se enfrentó con el Barça al Vissel Kobe.
Al término del partido Iniesta se dirigió a Gavi para cumplir el deseo de su hija. Y el centrocampista blaugrana se quedó anonadado viendo a su ídolo acercarse a él para pedirle un favor.
"No me lo puedo creer", dijo Gavi al término del partido. "Vino Iniesta a pedirme la camiseta... ¡A mí!" Pues sí, los tiempos cambian. Iniesta enfoca el camino hacia la retirada mientras Gavi está en la rampa de salida de una carrera muy prometedora.
Por supuesto, Gavi no pudo decirle que no a Iniesta, su ídolo, y el futbolista manchego pudo volver a casa con la satisfacción del deber cumplido y la camiseta de Gavi bajo el brazo.
