El diario As intenta hacer más llevadero el pichichi de Lewandowski criticando sus pocos goles, pero no se plantea si el que realmente el "barato" es el Balón de Oro y sus paupérrimos 12 goles sin penaltis
Con la clasificación del pichichi en la Liga que acaba de finalizar sucede algo parecido a lo que se ha visto con LaLiga. Si no la gana el Real Madrid, es aburrida y soporífera. El pichichi, si no lo gana un delantero blanco, es "barato".
Nada nuevo en la viña del señor. El Barça es un líder aburrido, pero le saca diez puntos al segundo. ¿Cómo habrá sido el segundo clasificado? ¿Muy divertido? Lewandowski, un pichichi "barato". 23 goles, ninguno de penalti. Cinco más que el segundo, Karim Benzema, que para llegar a 18 necesitó lanzar seis penaltis. Es decir, goles de verdad, de jugada, 12. ¿Es eso un goleador "caro"?
Pero el diario As no sale con eso, y sí con que el pichichi es barato y que hace un montón de años que el máximo goleador no marcaba tan pocos goles. Eso tiene fácil solución: si Lewandowski es barato, que Benzema le pinte la cara, o Vinicius, o Rodrygo o Mariano... ¿Son todos ellos todavía más "baratos" que Lewandowski?
Llama la atención que el mega Balón de Oro, Karim Benzema, de profesión delantero centro goleador, haya marcado en toda LaLiga 12 goles si exceptuamos los penaltis y se las cargue Lewandowski por haber anotado "solo" 23 goles de verdad. Pero así son felices y el triunfo de Lewandowski en el pichichi pica menos.
Nadie se preguntará por qué el Balón de Oro no da más que para meter 12 goles. ¿No será que el "barato" es el Balón de Oro? ¿No será que nunca tan poco llegó a Balón de Oro? Ni goles ni títulos de enjundia.
Para encontrar un pichichi tan barato como el de Lewandowski hay que remontarse a la temporada 2001-2002 con Diego Tristán, que anotó 21. Y a Emilio Butragueño, que fue pichichi con 19 goles en la 1990-91.
Ya es triste que para encontrar a un pichichi más "barato" que Lewandowski haya que remontarse a Butragueño. La historia tiene estas trampas.