Raphinha terminó visiblemente enfadado con Xavi el partido de ida contra el Manchester United. El internacional por Brasil estaba siendo el mejor culer del encuentro, pero el entrenador le cambió. No le sentó nada bien y tuvo una reacción que pudo terminar lesionándole.
En el siguiente partido, contra el Cádiz, Raphinha inició desde el banquillo. Todo parecía indicar que era para darle descanso de cara a la vuelta en Old Trafford, pero Mundo Deportivo ha descubierto la realidad: el brasileño terminó con dolor de rodilla.
Esta información destaca que "había quedado 'tocado' tras su monumental enfado de la ida ante el United, cuando el técnico le sustituyó en el minuto 82". No le sentó nada bien el cambio, y lo exteriorizó dándole una patada a la nevera en las que se guardan las bebidas, al igual que con un puñetazo a los asientos del banquillo.
La patada a la nevera pudo terminar mal. Raphinha terminó con la rodilla de esa pierna muy dolorida. Lo que le impidió salir de titular en el partido contra el Cádiz, que sirvió, por otro lado, para ver la mejor versión de Ferran Torres desde que llegó al Barça.
Raphinha aprendió la lección: no volverá a hacerlo. También entendió que fue una reacción desmedida. Pidió perdón y no volverá a pasar.