El antiguo jugador barcelonista admite que hizo lo que pudo para evitar que Tchouaméni fichara por el Real Madrid y alertó al Barça y al Chelsea o el Arsenal.
Aunque Aurélien Tchouameni, el fichaje más caro que ha realizado el Real Madrid esta temporada, está sufriendo una campaña de desprestigio especialmente en la ciudad condal recurriendo al tópico de que el Real Madrid ha gastado 80 millones, más 20 en variables, en un futbolista que nadie conocía hace cuatro meses, lo cierto es que lo que ha mostrado hasta ahora justifica los nervios que este refuerzo madridista genera entre la competencia.
Tan malo no debe ser cuando Cesc Fàbregas, que la pasada temporada fue compañero de Tchouaméni en el Mónaco, ha admitido que intentó desviar su destino colocándole en el Barça para que no fichara por el Real Madrid.
Cesc Fàbregas, que ha dejado el Mónaco para cubrir su última etapa como futbolista en el Como, de la segunda división italiana, ha reconocido en una entrevista a la Cadena Cope que puso en alerta a "gente del Barça" sobre la calidad del futbolista ahora madridista: "Hablé con gente del Barça para que lo ficharan, me parecía un jugadorazo para el futuro".
Pero este tipo de fichajes, por encima de los 50 millones son prohibitivos para el Barça, que solo tiene acceso a jugadores con la carta de libertad o veteranos o jugadores contrastados cuya cotización no excede de los 50 millones.
Cesc ha reconocido que intentó impedir que fichara por el Real Madrid: "Conozco muy bien a Tchouaméni, pero económicamente no se podía fichar". Y para confirmar su deseo de torpedear el fichaje por el Real Madrid, reconoce que, una vez que vio que el Barça no podía ficharle, buscó otra alternativa: "Le di la opinión a otro exequipo y al final ha ido al club 'enemigo'. Hay que aprovechar las oportunidades de mercado", ha dicho. Sus otros "ex equipos" son Arsenal y Chelsea. Blanco y en botella.
Cesc también ha opinado sobre la vuelta de Leo Messi al Barça después de que fuera despedido de mala manera y saliera por la puerta de atrás: "Como barcelonista espero y deseo que Messi vuelva al Barcelona. Le queda un año en París. Me encantaría. Es un sueño que tiene el club y toda la afición. El fútbol es muy caprichoso. Te hablo como aficionado".