El Barça aplasta al Real Madrid en el primer clásico de la temporada. Sin Mbappé y Benzema, la épica ya no le funciona a los blancos.
"Presi... ficha a Mbappé". Cuanta razón tenían los aficionados madridistas cuando le pedían a su presidente que contratara a la estrella francesa. El "presi" estaba tan tranquilo que se durmió en los laureles y Mbappé se le escapó. Pero al Barça no se le escapó Lewandowski, otro viejo sueño frustrado del presidente Pérez, y la primera en la frente. Primer clásico con Lewandowski, primera victoria del Barça. Después del último 0-4 sabe a poco, pero como dijo Xavi al término del partido, lo mejor no ha sido el resultado sino la sensación de superioridad que ha ofrecido el Barça en todo momento en Las Vegas.
El Barça le ha dado un repaso al Real Madrid y ha puesto de manifiesto las carencias del equipo blanco, que puede formar un buen equipo, pero le falta banquillo. Y el Barça va sobrado. Hoy ha dado una lección de poderío. El ataque titular, con Raphinha, Lewandowski y Ansu Fati, letal. Pero los del banquillo dan miedo: Dembélé, Aubameyang y Memphis, con Pau Torres en la recámara.
El Barça empezó ganando el partido de la españolidad: seis españoles (cinco canteranos) contra uno del Real Madrid. Y también ganó el clásisco de los fichajes: uno de los nuevos, Raphinha, resolvió el partido con un golazo. El partido, lo previsto. El Barça dominando y el Real Madrid esperando la aparición de la Virgen en busca del milagro. Pero la épica no funciona cuando está el Barça delante.
Y es que éste es otro Barça. Aquí no caben las mediocridades. Todos son buenos. Ni siquiera Frenkie De Jong tiene sitio. Xavi le ha colocado de central, como si fuera Koundé, en lo que se ha entendido más como un castigo por no querer irse que como una declaración de intenciones. Tampoco salió Piqué como titular. El central catalán fue abucheado cada vez que tocaba el balón. La parroquia colombiana no le perdona su ruptura con Shakira.
Y lo de siempre cuando el Real Madrid está delante. Al Barça le escamoteó el árbitro dos penaltis. Dos manos de libro dentro del área de Odriozola que el colegiado no quiso pitar. Ni en Las Vegas se soluciona este mal endémico del que se beneficia siempre el Real Madrid históricamente.
Y lo de siempre, también, en Las Vegas se ha visto a un Madrid protestón, con sus jugadores intimidando al árbitro para conseguir las decisiones que más les favorecían, y tanganero. Ver a Rodrygo repartiendo puñetazos a todo culé que se le ponía por delante da una idea del grado de desquiciamiento que tenían los blancos. Lo demostró Ceballos dándole un bofetón en la cara a Nico cuando le salió mal un penalti que pretendió simular.
El Barça se ha gustado en Las Vegas y ha confirmado que le tiene tomada la matrícula al Real Madrid después del último antecedente del 0-4 en el Bernabéu. Y es que este Real Madrid, sin Mbappé ni Benzema, es muy poquita cosa. Vinicius, encargado de tirar del carro, ha confirmado sus limitaciones y por qué nunca estará entre los candidatos al Balón de Oro. Curioso, además, que Benzema no jugara porque lleva pocos entrenamientos. Lewandowski solo ha entrenado dos veces y apenas ha tardado diez minutos en poner a pruba a Courtois.
Inmenso Araujo humillando a Rüdiger en una carrera por la banda en la que partía con desventaja. Después de lo visto hoy el Barça se llevó al bueno del Chelsea. Christensen, que salió como titular junto a Eric García, ha sido de lo mejor del partido. ¿Y Tchouaméni? Ni estuvo ni se le esperó. En cambio Raphinha fue el MVP del partido.
El Barça se ha comido literalmente al Madrid, se ha llevado todos los balones divididos y ha jugado con más cabeza. Bien ordenados sobre el terreno de juego, los hombres de Xavi han disfrutado siempre de situaciones de superioridad ante un Real Madrid descontrolado. Ha sorprendido la precisión con la que el Barça ha movido el balón. Si a estas alturas son capaces de jugar a este nivel, ¿qué no harán cuando estén todos al cien por cien?
La presión del Barça ha sofocado al Real Madrid y su entrenador, Carlo Ancelotti, ha evidenciado sus carencias como técnico sin capacidad de respuesta ante la superioridad blaugrana.
El Barça ha podido liquidar el primer clásico de la temporada con otra manita, una más. Pero Courtois lo ha impedido. Y eso es bueno para el Barça. Que Courtois sea el mejor jugador del Real Madrid es tanto como admitir que el rival ha sido muy superior. Dembélé, Memphis y Raphinha dispusieron de situaciones de gol claras para marcar. Y es que en el recuento final, las aproximaciones del Barça fueron mejores y más numerosas que las de los blancos.
El Real Madrid ha empezado hoy una nueva era tras el trauma de Mbappé. Y lo que se ha visto en el campo, es que mientras los refuerzos del Barça tiran del equipo hacia delante, los del Real Madrid no mejoran en nada lo que había. El Barça ha presentado su candidatura para volver a mandar en España y en Europa.
Real Madrid: Courtois, Lucas Vázquez, Militao, Rüdiger, Alaba, Camavinga, Tchouameni, Valverde, Rodrygo, Hazard y Vinicius. Asensio, Mendy, Modric, Kroos, Casemiro, Nacho, Vallejo y Odriozola.
FC Barcelona: Ter Stegen, Araujo, Èric Garcia, Christensen, Jordi Alba, Busquets, Gavi, Pedri, Raphinha, Ansu Fati y Lewandowski. También jugaron Dembélé, Aubameyang, Balde, Kessie, De Jong, Sergi Roberto, Memphis, Dest, Iñaki Peña, Nico González y Piqué.
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