El entorno sevillista está presionando a José Castro y Monchi para que no acepten a ningún jugador del Barça en la 'operación Koundé'.
Jules Koundé es el objetivo prioritario del FC Barcelona para reforzar la línea central de la defensa. Después de activar las famosas palancas, el equipo catalán se ve capacitado para conseguir la incorporación del defensor francés, pero el Sevilla no quiere ponerlo tan fácil.
En los últimos días, se informó que el club andaluz estaba dispuesto a que entraran jugadores del FC Barcelona en la operación para abaratar el precio final de Koundé, como es el caso de Sergiño Dest o incluso Francisco Trincao, pero tanto el presidente de la entidad hispalense, José Castro, como el director deportivo, Monchi, están sufriendo duras presiones para que eso no suceda.
Según informa Mundo Deportivo, aficionados y medios de comunicación sevillistas están presionando a José Castro y Monchi para que no acepten a ningún jugador del Barça en la operación y se remitan al precio que le están pidiendo al Chelsea: 65 millones de euros.
Eric García y Christensen serán los suplentes de la pareja de centrales titular que ha diseñado Xavi. Y Piqué andará por ahí. No le pueden obligar a retirarse teniendo dos años más de contrato, pero sabe lo que le espera y la confirmación de las gestiones con Koundé valoran la postura de Xavi de explicarle a la cara a su amigo Piqué sus planes de futuro.
De hecho, a Piqué le está sucediendo con Xavi lo mismo que le ocurrió a él con Luis Enrique. También excompañeros e íntimos amigos, Luis Enrique le tuvo que explicar un día a Xavi que con 35 años no era ya una apuesta de futuro, que debía dar cancha a los jóvenes y que su papel en el equipo sería el de suplente. Así acabó Xavi sus días como jugador del Barça.
Para Xavi, el fichaje de Koundé, que solo tiene 23 años, es tan imprescindible como el de Lewandowski. A Xavi le gusta Koundé por su calidad en la salida del balón y su capacidad para sumarse al ataque como un centrocampista e incluso como un extremo por la banda.