El Camp Nou coreó el nombre de Mbappé felicitándole por el acierto de su elección final.
El Camp Nou coreó el nombre de Kylian Mbappé durante varias fases del partido que enfrentó al Barça y al Villarreal como cierre de la temporada.
El recinto blaugrana registró media entrada, poco más de 54.000 espectadores, pero buena parte de ellos se contagiaron del ambiente destivo que vive el Barça desde que Mbappé anunció al mundo sus calabazas a Florentino Pérez.
En Madrid algunos columnistas, como Joaquín Maroto en As, han convertido a Mbappé en el enemigo público número uno del madridismo, aconsejándole que no se acerque por la capital del reino español y advirtiéndole que cuando tenga que jugar en el Bernabéu el recibimiento a Figo en el Camp Nou se quedará pequeño con él.
La decepción que ha generado Mbappé entre el madridismo es proporcional a la euforia que ha creado en el barcelonismo, que asistía asustado a las sentencias de la claca mediática de Florentino Pérez garantizando Champions para el Real Madrid y Balones de Oro para Mbappé en los próximos diez años.
El Camp Nou le transmitió sus simpatías a Mbappé por el acierto de su elección.