No hay más que hablar. El caso está visto para sentencia. Mbappé se convertirá en jugador del Real Madrid el próximo 1 de julio. Las dos partes están de acuerdo. A la tercera parte, el PSG, sólo le resta llorar por la pérdida de su estrella.
Florentino Pérez y Mbappé ya han acordado las condiciones del contrato que le vinculará al Real Madrid por los próximos cinco años. El acuerdo es total y los últimos flecos ya están despejados. El club blanco y el jugador han pactado que después de la eliminatoria de Champions League que enfrentará a Real Madrid con el PSG, Mbappé anunciará que no seguirá en el equipo parisino la próxima temporada.
Que su destino es el Real Madrid no lo hará público hasta el mismo 30 de junio. Para el 1 de julio el club blanco le tiene reservado un recibimiento digno de jefe de estado.
Mbappé no tendrá un contrato astronómico del nivel del que disfrutó Leo Messi en su último año en el Barça (138 millones de euros anuales), pero sí estará a la altura de lo que pagaba el Real Madrid a su gran estrella, Cristiano Ronaldo, hace cuatro años.
La estrella francesa cobrará 40 millones anuales brutos, de los que la mitad quedarán netos para él. Menos de diez millones más de lo que ingresaba en el Real Madrid Sergio Ramos y apenas cinco más de lo que perciben actualmente Gareth Bale y Eden Hazard.
Teniendo en cuenta que el Real Madrid no tendrá que abonar un sólo euro al PSG por su traspaso, ha acordado con el jugador una prima de fichaje de otros 40 millones de euros, que se repartirán su padre Wilfried y la abogada Delphine Verheyden.
El montante total de la operación se queda en 240 millones. Es decir, 48 millones por temporada, una cantidad más que razonable para un jugador del que se espera reine en el fútbol mundial durante la próxima década.
Mbappé está recibiendo muchas presiones en París para que se deshaga del acuerdo al que ha llegado con Florentino Pérez. Kylian sabe que lo va a pasar mal en sus últimos meses parisinos porque la campaña de prensa que se va a desatar contra él va a ser feroz. Y lo sabe porque así se lo ha comunicado el club.
Mbappé hará las maletas rumbos a Madrid escuchando y leyendo cómo se le acusa de traidor por dejar el club más millonario del mundo para irse al mejor club de la historia. El orgullo francés se siente herido... y el qatarí, que todo lo compra con dinero, más.