El relevo en el banquillo del FC Barcelona ha sido solucionado a medias por Joan Laporta. Mientras Xavi ha aceptado cobrar la mitad que su antecesor, Ronald Koeman sigue sin dar facilidades para firmar su finiquito con una rebaja importante.
El cambio de entrenador en el FC Barcelona tenía dos vertientes complicadas. Por un lado, convencer a Xavi para que aceptara dirigir al Barça con un salario muy por debajo de lo que se lleva en el mercado en los grandes clubes europeos y en el Barça en su historia reciente. Por otro lado, había que solucionar el finiquito de Ronald Koeman, que sube a casi 13 millones de euros.
Xavi ha aceptado cobrar 3,9 millones. Un millón para su equipo de siete colaboradores. El resto para él. Es decir, que Xavi Hernández percibirá 2,9 millones por temporada a la espera de que lleguen tiempos mejores. Además, para poder dirigir al Barça Xavi ha tenido que poner de su bolsillo 2,5 millones, la mitad de la cláusula exigida por el Al Sadd, por lo que puede decirse que trabajará en el Barça esta temporada de forma gratuita.
Además, Xavi cobraará también mucho menos de lo que percibía en el Al Sadd qatarí, en donde ingresaba 7 millones de euros netos, porque allí los impuestos no se ceban con las grandes fortunas.
Aún así, Xavi tiene garantizados una serie de pluses por título ganado. Si consiguiera el triplete a final de temporada (Liga, Copa y Champions) sus ingresos podrían situarse por encima de los 10 millones de euros, algo que el club podria permitirse porque si llegaran esos títulos también el capítulo de ingresos se vería afectado de forma favorable.
Su nuevo salario es menos de la mitad de lo que percibía Ronald Koeman, que estaba también en 7 millones. Eso es lo que quiere cobrar Koeman como finiquito, con los atrasos que tiene pendientes, que elevan la cifra por encima de los 12 millones.
Laporta intentó una jugada maestra: que el propio Koeman pagara la cláusula de rescisión de Xavi renunciando a cinco millones de su finiquito. Pero el holandés, que ya en su momento hizo un sacrificio para dejar la selección de Países Bajos por el Barça, no acepta rebajar un solo euro de lo que tiene firmado con el club.
El detalle es importante porque si el Barça y Koeman no llegan a un acuerdo antes de una semana, Xavi no podrá sentarse en el banquillo del Camp Nou en su debut del próximo sábado ante el Espanyol. El Barça debería recurrir otra vez a Sergi Barjuan. La decisión está en manos de Koeman, a quien en este momento le importa muy poco si Xavi se sienta o no en el banquillo que él ocupó durante año y medio. Ahora mismo sólo le preocupa que el Barça le pague lo que está estipulado en su contrato. Y Laporta tendrá que ceder.